EEUU continuará navegando aguas internacionales cercanas a China

El ejército estadounidense continuará sus desplazamientos en el mar de China Meridional, en cualquier lugar en el que tenga derecho, aseguró este martes el almirante Harry Harris, poco después del paso de un buque de guerra de Estados Unidos cerca de unos islotes reclamados por China.
"Las aguas internacionales y el espacio aéreo internacional pertenecen a todo el mundo" y no pueden encontrarse "bajo el domingo de una nación cualquiera", insistió el almirante Harry Harris, jefe de las fuerzas estadounidenses en el Pacífico, durante una visita a China.
"Nuestro ejército continuará volando, navegando y operando dondequiera que el derecho internacional nos autorice. El mar de China Meridional no es ni será una excepción", declaró, según el texto de un discurso pronunciado en la universidad de Pekín.
El buque lanzamisiles "USS Lassen" navegó el 28 de octubre al menos a 12 millas náuticas de las islas artificiales construidas por Pekín en el mar de China Meridional, en el disputado archipiélago de las Spratly.
Pekín denunció "una incursión ilegal, sin el permiso de China", que consideró como una "amenaza" para su soberanía y sus intereses en materia de seguridad.
China considera como aguas territoriales la zona de 12 millas náuticas que rodea a estas islas.
"El orden internacional está siendo amenazado por parte de Rusia, y, de diferente manera, de China, con sus ambiguas reclamaciones marítimas", afirmó el comandante frente a una audiencia de estudiantes, a quienes, no obstante, aseguró que, a pesar de que algunos analistas prevén un "choque" entre las dos principales potencias, él descarta que vaya a ocurrir.
Según Harris, EEUU y China han avanzado mucho en su cooperación y ese debe ser el camino para evitar que escalen las actuales tensiones: "Aún existen áreas de tensión. En mi opinión, ahí es cuando el diálogo entre fuerzas militares se necesita más", consideró.
De ahí su actual visita de tres días a la potencia asiática, donde se reunirá con oficiales del Ejército chino y visitará instalaciones militares.
"Creo sinceramente que (nuestras) rutinarias operaciones no deberían ser tomadas como una amenaza. Estas operaciones sirven para proteger los derechos, las libertades y el uso legítimo de las aguas y el espacio aéreo garantizado por la legislación internacional", argumentó.
El gobierno de Pekín reivindica además derechos sobre la casi totalidad del mar de China Meridional, donde está llevando a cabo grandes obras que están transformando los arrecifes en puertos, pistas y otras infraestructuras.
Pero Estados Unidos rechaza esa reivindicación, estimando que China no puede construir de esa forma una soberanía en esas aguas estratégicas, por las cuales Pekín tiene contenciosos con sus vecinos asiáticos.
El archipiélago de las Spratly, formado por un centenar de arrecifes e islotes inhabitados, está reivindicado también por Vietnam, Malasia, Brunei y Filipinas, un aliado de Washington.
Estados Unidos y los países del sureste de Asia temen una intervención del gigante chino que le otorgaría el control de una de las rutas marítimas comerciales más estratégicas del mundo, por la que transitan especialmente un tercio del cargamento mundial de petróleo.
Harry Harris pronunció, no obstante, algunas palabras conciliadoras el martes para elogiar el diálogo entre las marinas china y estadounidense, y recordar las visitas efectuadas por los buques de cada nación a los puertos del otro país.
"Algunos expertos prevén un enfrentamiento próximo entre nuestras naciones. Yo no suscribo esta visión pesimista", consideró el almirante, quien destacó "muchos asuntos en los que [ambos países] tienen un punto de encuentro".