León Darío Thierry, el excéntrico amigo de las culebras

es vivir con una cascabel .adriana habó en colombia coneste exéntrico amigo de lasculebras.no hay anaconda, boa, coralo cascabel que no despierte lapasón de lón daío, estaconvencido que son los animalesás vistosos, sensuales yhermosas que habitan la tierra.lo que ás me seduce es suanatoía, su comportamiento.recuerda que su amor porestos reptiles se remonta a suinfancia.fue una pequeña falsa coralque le mostósu padre laprimera en robarle el coraón.uno no la quiere dejar ir.reportera: la pasón por estosreptiles condujo sus pasoshasta esta estacón deproteccón de la vidasilvestre, pasa sus ías conlas que llama sus mejoresamigas.no soy laúnica que se asustacon la pasón de lón daío, sufamilia vive aterrada con eseamor incomprensible.a veces atrído serpientes ala casa, la vez pasada trajocomo cinco en unas cajas,valés, me da mucho miedo.para í, despés de mifamilia, las serpientes.esta curiosa relacón haestado a punto de costarle lavida, en tres ocasionesserpientes venenosas lo hanmordido. si embargo, insiste enestar a su lado.cuando estuvo en cuidadosintensivos duro 15 ías, losédicos no nos dabanesperanzas, mis hijos estabanpequeños y aqí no haía ladosis que le colocaron, ladosis fue trída de brasil.en colombia siempre aescasear o el suero antioídico.asegura que las cuida paraextraer el veneno y poderfabricar el cuero.esta haciendo una tareaextraordinaria, no solamentepara bogoá, sino para todo elmundo, es el hecho de ir encontra del táfico ilegal deespecies.la familia sufre ensilencio, viven con el temorque algo le pase por culpa desus amigas.es el miedo que siemprehemos tenido porque mi paápuede saber mucho, pero puedellegar el momento en que unaserpiente se le resbale y lopueda morder.reportera: se dice lón daíoque si pudiera cambiar algoseía el pasaje del énesis enel que a una serpiente laculparon de invitar a eva acomer el fruto prohibido,asegura que desde ese ía susamigas se hicieron acreedorasdel odio universal.michelle: sueña con tener unaserpiente como mascota, pero no