David Ayer sale del reboot de Scarface y el proyecto vuelve a quedar sin director [Análisis]
Una vez más el reboot del superclásico del cine Scarface pierde a su director. Primero fue Antoine Fuqua ( Training Day) quien salió por conflictos de tiempo con otros proyectos, luego sería el cineasta chileno Pablo Larraín quien abandonaría la silla. Ahora el reboot pierde a David Ayer también por cuestiones de agenda. El director de Suicide Squad se encuentra trabajando en dos proyectos simultáneos: Bright y Gotham City Sirens.
Sin ánimo de hacer de abogado del diablo, este reboot pinta mal desde el principio por varias razones. Esta versión mantendrá el eje central de la historia con un inmigrante que sube hasta lo más alto del mundo del crimen y termina de una manera trágica. Pero esta vez la trama se desenvuelve en Los Ángeles y no en Miami como en la versión de 1983, y tratándose de Diego Luna como protagonista, podríamos inferir que Tony Montana (o como quiera que le llamen esta vez) será mexicano.
Scarface se ha convertido en una de las películas de culto más grandes en la historia del cine, y parte de su impacto se debe al contexto histórico donde se desarrolla la historia y al momento en que se produce. Desde la primera escena con el famoso discurso de Fidel Castro maldiciendo a los emigrantes del éxodo del Mariel, del cual es parte el personaje de la película, el filme hace alusión a una coyuntura histórica que no tendrá una versión ubicada en Los Ángeles.
El filme de Brian De Palma fue una verdadera radiografía del turbulento Miami de los 80, con los marielitos adueñándose del tráfico local de cocaína. Además, la cinta fue la primera que mostró a Miami como centro importante del crimen organizado, y de cierta forma la puso en el mapa entre las grandes urbes del país. Sin dudas Scarface abrió la puerta a producciones que contribuyeron a la popularidad internacional de la ciudad, como la serie Miami Vice.
También la magnífica caracterización de Al Pacino fue clave en el éxito de la película, secundado por Michelle Pfeiffer y Steven Bauer. Cuesta trabajo creer que Diego Luna tenga el arsenal actoral para emular al Tony Montana de Al. Recordemos su trabajo en Dirty Dancing: Havana Nights, donde le faltó el sex appeal y la picardía callejera de la versión original encarnada por Patrick Swayze. Luna tiene talento, pero no todos los actores pueden hacer todo tipo de papeles.
Por último, la nave queda una vez más sin capitán cuando tiene fecha de estreno en agosto de 2018 y tan solo se encuentra en preproducción, es decir que no se han ensayado escenas, no se han producido los sets y no se ha rodado nada aún.
De todas formas, queda algo de esperanzas ya que el reboot contará con un equipo robusto de escritores y productores, incluyendo al productor de la versión de 1983, Martin Bregman.
BONUS: Este reboot sería llover sobre mojado, ya que sería una tercera versión de la misma historia. Scarface fue producida por primera vez en 1932 bajo la dirección de Howard Hawks y Howard Hughes, y el personaje principal se llamaba Tony Camonte.
Ver también: