{ "@context": "http://schema.org", "@type": "BreadcrumbList", "itemListElement": [ { "@type": "ListItem", "position": 1, "item": { "@id": "/explora", "name": "Explora" } } ] }
null: nullpx
Ciencia y Tecnología

¿La saliva es el secreto para el beso perfecto? Esto es lo que dice la ciencia

Publicado 30 Abr 2018 – 02:35 PM EDT | Actualizado 30 Abr 2018 – 03:30 PM EDT
Comparte

Aunque no lo creas, no todo en el acto de besarse por primera vez se lo debemos a los sentimientos. El cuerpo también hace lo suyo, pues la saliva que segregamos durante ese evento incrementa el deseo sexual y provoca cambios en el organismo que pueden estar relacionados con la evolución y la transmisión de genes de una generación a otra.

Los científicos han comenzado a estudiar la bioquímica de los besos en un campo que se denomina filematología y han encontrado relación entre el besarse y la estimulación de las hormonas que tienen que ver con el acto de aparearse y otro tipo de relaciones afectivas.

¿Para qué nos besamos?

Los estudios realizados en el tema sugieren que los hombres –proclives a dar besos mojados con la boca abierta– están tratando inconscientemente de pasarles esta sustancia a las mujeres para estimular su libido. Otra tesis plantea que a través de los besos el cuerpo percibe si la persona con la cual se está relacionando es fértil y puede producir una mayor descendencia.

Lo cierto es que más del 90 % de las sociedades humanas se besa, así como algunos primates –bonobos o chimpancés pigmeos. Además, en el reino animal encontramos comportamientos similares: los zorros se lamen las caras, las aves chocan los picos, entre otros.

La importancia de la saliva

Todos sabemos que el primer beso que damos a una persona puede determinar si seguimos o dejamos de verla. Se trata de un modo de asegurar un compañero sexual potencial. Sin embargo, detrás de todo ese cortejo, hay mecanismos químicos de los que no tenemos la menor consciencia.

Según los expertos, una de las claves del éxito reproductivo del ser humano reside en la testosterona. La saliva contiene precisamente esta hormona que estimula considerablemente el deseo sexual. Es decir, la saliva contiene el secreto para que nos agrade tanto –o no– un primer beso.

Relación entre el estrés y las hormonas sexuales

En 2007, psicólogos del Colegio de Pensilvania hicieron experimentos con parejas de estudiantes y encontraron que en los que se besaban disminuían los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

Por otro lado, en los hombres aumentaba la oxitocina, el neurotransmisor asociado con los patrones sociales y los lazos afectivos, aunque en el caso de las mujeres esta hormona se veía reducida.

Cambios en el organismo durante el beso

El beso y la saliva promueven cambios en el organismo, entre los que juega un rol central la estimulación de feromonas que se van liberando del cuerpo y son captados por los órganos de los sentidos, especialmente la boca y la nariz. Esto le permite a cada cual saber si el otro está excitado.

Por otro lado, las pupilas se ensanchan, y esta es la razón por la cual cuando besamos frecuentemente cerramos los ojos. Otra de las consecuencias positivas que han sido estudiadas por los especialistas es la disminución de los niveles de colesterol en sangre y el aumento de la satisfacción en la relación de pareja.

Los científicos aún tienen mucho que investigar sobre este la bioquímica del beso entre los seres humanos, pero sin dudas los resultados hasta ahora confirman el valor del acto de besar en el desarrollo de las relaciones humanas y de la reproducción, así como el rol que dentro de este juega la estimulación hormonal.

¡Quién diría que la saliva sería el secreto para un beso perfecto!

Comparte