Algunos datos sobre la fecha probable de parto
La fecha probable de parto (FPP) es un número promedio calculado con un gestograma, que marca la mitad del período en que los bebés a término pueden nacer entre las 38 y las 42 semanas. La FPP es el promedio de ese tiempo, es decir, alrededor de la semana 40 de gestación.
Es importante recordar que cada bebé tiene sus tiempos de gestación y nacerá cuando está listo para hacerlo ¡aunque ese día no coincida con la fecha que teníamos en mente! Suele generarse mucha expectativa alrededor de ese día, pero en realidad un porcentaje no muy alto de bebés nacen exactamente ese día. Aquí te contamos algunos datos sobre la fecha probable de parto.
- Una ecografía al principio del embarazo aporta exactitud: la FPP, como dijimos, se estipula alrededor de la semana 40 de embarazo contando desde el último día de menstruación. Pero si tus períodos no son regulares, los cálculos acerca de la última fecha de ovulación y concepción pueden ser incorrectos. Una ecografía hecha al principio del embarazo aportará exactitud al cálculo del nacimiento y evitará una inducción antes de tiempo.
- La mayoría de los bebés no nacen en la exacta FPP: parece difícil de creer pero solamente 3 de 100 bebés nacen en esa fecha. El 90% de los bebés nacen entre las semanas 38 y 42.
- Las mamás primerizas suelen parir luego de la FPP: alrededor del 70% de las mujeres que son mamás por primera vez tienen a sus bebés después de la semana 40 de embarazo. También hay una tendencia a repetir este patrón en los hijos subsiguientes.
- Las FPP pueden no ser correctas: muchas veces se sabe la fecha de la última menstruación pero no se lleva registro del largo de los ciclos de fertilidad y por tanto no se puede saber cuándo fue la fecha de concepción, que es en realidad lo que indicaría con mayor precisión la fecha probable de parto.
Muchas veces se cree que un parto está por suceder pasada la semana 42 y cuando el bebé nace se descubre que, en realidad, es un pequeño de menos semanas de gestación, lo que indica que el cálculo no había sido correcto porque la fórmula para deducir la ovulación a partir de la fecha de última menstruación no había generado exactitud (probablemente en una mujer con ciclos irregulares).