Guía definitiva de la buena inquilina
¿Alquilas por primera vez? ¿O tuviste malas experiencias alquilando? ¡No te preocupes! Aquí vas a encontrar los mejores consejos para ser una buena inquilina, para que el propietario esté contento contigo y tengan la mejor relación.
Lee y respeta el contrato de arrendamiento
Allí encontrarás todos tus deberes y derechos, por lo que debes tenerlo siempre presente. Antes de firmar, si hay algo que no figura o que te gustaría que quede aclarado, comunícalo al propietario, por ejemplo: si aceptan mascotas, si sabes que recibirás familiares que vienen de vacaciones, si quieres compartir la renta con una amiga, etc.
Paga el alquiler a tiempo
¡Es primordial! Si pagas todos los meses antes de la fecha límite, el propietario va a estar feliz de tenerte allí y de no tener problemas de dinero contigo. Si en un mes determinado vas a pagar un par de días después por determinadas circunstancias, mejor se lo dices al dueño antes de que llegue el día. Es una señal de responsabilidad.
Cuida el departamento como si fuera oro
Aunque los daños por desgaste son normales, lo mejor es que el departamento o casa permanezca siempre en perfecto estado, para que el propietario tenga un buen concepto tuyo y no perder el dinero del deposito.
No te mudes antes de terminar el contrato
Romper con el contrato de manera abrupta e irte sin finalizar el tiempo pactado no es de buena inquilina, porque el propietario cuenta contigo durante los meses acordados.
No te pierdas: 9 consejos útiles para alquilar una casa
Sé buena vecina
No hay peor dolor de cabeza para un propietario que un inquilino/a que no respeta a los vecinos. Evita problemas y compórtate de manera civilizada en tu nuevo apartamento. Ya no eres una adolescente, eres una persona adulta que sabe cuándo no poner la música alta, ni ser irrespetuosa con los demás.
Ocúpate del mantenimiento
No quiere decir que pagues por todo, aún cuando no te corresponda. Cuando algo suceda en tu hogar rentado, deberás comunicarlo al dueño con tiempo para que pueda enviar a una persona idónea a repararlo. Ocúpate de las cosas sencillas normales de una casa, sin molestar al propietario, como cambiar una bombilla o la batería del detector de humo.
Paga los impuestos que te corresponden
Si el alquiler no incluye los impuestos, deberás pagarlos en tiempo y forma, sin retrasos ni olvidos. Entrégale al propietario las facturas pagas, pero quédate con una copia.
Lee también: 5 formas de ahorrar dinero en impuestos
Sé respetuosa
El respeto para con el dueño/a de la casa es fundamental para ser una buena inquilina. Escucha sus consejos y hazte escuchar de manera educada.
Si honras esta guía máxima, ¡serás la inquilina perfecta! Eso es algo positivo, pues te hará vivir tranquila y te ayudará al momento de conseguir un nuevo apartamento en alquiler.
¿Tienes más consejos? ¡Cuéntanos!