Estos son los 11 trucos que necesitas saber para que tu comida tenga mejor sabor
No solo importa que se vea bien, sino también que su sabor sea excelente.
Seguro te ha sucedido que pasas el día entero en la cocina para hacer esa nueva receta en una ocasión especial, y en el momento de probarla no cumple con tus expectativas. Queda bien, pero el sabor no te cautiva, y crees que has hecho algo mal.
¡Aquí te traigo una solución! Probablemente estés haciendo todo bien, pero te falte aplicar estos 11 consejos útiles que harán que el sabor de tus comidas sea increíblemente bueno.
1. Sumergir la cebolla en agua
Siempre que vayas a preparar una receta que contenga cebollas crudas, lo ideal es que antes de agregarlas a tu plato las dejes en remojo con agua fría.
Generalmente optamos por descartar la cebolla porque se nos hace difícil de digerir, y nos produce mal aliento. ¡Con este truco eso se acabó! El agua fría elimina los sulfatos y hace que la cebolla sea mucho más tolerable para nuestro sistema digestivo a la hora de consumirlas.
2. Ingredientes a temperatura ambiente
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Cuando tengas en mente preparar un sándwich, procura que algunos de los ingredientes estén a temperatura ambiente para que sea más fácil y el sabor mejore. La mantequilla es mucho más fácil de manipular si está a temperatura ambiente, además evitas que el pan se rompa.
Además, si usas queso, al estar a temperatura ambiente te beneficias porque al cocinar el sándwich se derrite uniformemente y no tienes que calentar varias veces, que puede traerte otro problema como quemarte el pan. Para que se derrita más rápido y mejor, te recomiendo que coloques el queso rallado.
3. Cambiar el agua por caldo
Si planeas cocinar comidas en agua, por ejemplo un arroz, cámbiala por algún caldo del sabor que prefieras o te guste en la comida que vas a prepara.
Esto hará que el sabor se acentúe, y que tu plato sea delicioso. Los caldos bajos en sodio son los ideales para controlar los sabores de las comidas.
4. Sal y canela
Antes de preparar el café, agrégale a los granos una pizca de sal y otra de canela, no querrás beberlo de otra manera después de probarlo. La sal elimina la amargura de tu café, y permite que el sabor de la canela se acentúe, lo que le dará un sabor muy especial.
5. Sal en la ensalada
Para que una ensalada sea perfecta, las verduras deben estar bien crocantes. Para eso, debes tratar de que no tengan demasiado líquido y la solucón es ta simple como echarle un poquito de sal a los vegetales. De esta forma eliminan todo el líquido que guardan, y puedes lograr una ensalada muy crujiente y súper sabrosa.
6. Macerar las carnes
Debes utilizar el método aterciopelado, que consiste simplemente en cubrir los filetes de carne con una capa de harina de maíz y luego agregar claras de huevo. Esto hará que la textura de la carne sea muy suave, y evita que quede dura o seca, lo que permitirá que su sabor se luzca.
Al lograr que la humedad de la carne esté por fuera, su temperatura se conserva baja y no correrás el riesgo de quemarla o cocinarla de más. Para realzar aún más su sabor, puedes incorporar vinagre o vino de arroz.
7. Igualar las cantidades
Si a última hora planeas una merienda y no quieres esperar a tus amigas con las manos vacías, lo primero que se viene a tu mente es hacer una torta. Pero... ¡no encentras ninguna receta! Esta es la solución ideal para salir del apuro: iguala el peso del azúcar con el de la harina, y el peso de los huevos al de las grasas. En cuanto a estos últimos la proporción no tiene por qué ser exacta, pero si se aproxima, mejor.
Sin dudas, quedarás bien parada con tus invitadas y no solo habrás hecho una torta sin seguir recetas, sino que además conservarás un rico sabor.
8. Mostaza y mantequilla de maní
Sumarle mostaza a las salsas es una idea genial si lo que buscas es realzar los sabores. Además, si también quieres espesar un estofado te recomiendo que agregues una cucharada de mantequilla de maní y veas qué bien funciona.
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9. Vinagre balsámico
Le da un toque increíble de sabor a todas las pastas, verduras y a las fresas. ¡No dejes de probarlo! Además, es muy sano.
10. Bicarbonato de sodio
Si eres fanática del té helado, pero no tanto de su acidez, puedes reducirla fácilmente si agregas un poco de bicarbonato. Lo que hará es neutralizar el tanino del té, y será más gustoso.
11. Harina de maíz
¿Te gustan los huevos revueltos pero no logras que queden bien? Tal vez deberías probar agregar un poco de harina de maíz, verás que tus huevos serán más esponjosos y cremosos, con un sabor increíble. Además, se harán más rápido, y evitas que se queden gomosos o se quemen mientras cocinas.
¿Qué te parecieron estos consejos? Te recomiendo que los pongas en práctica, son muy simples y efectivos. Luego no vas a querer dejar de hacerlo, tus comidas no volverán a ser las mismas luego de usar estos trucos.
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