Separan con éxito en Chicago a una bebé de su gemelo parásito
Luego de distintos exámenes médicos, rayos X, tomografías de columna para evaluar el canal espinal y resonancias magnéticas, una bebé africana fue operada con éxito en Chicago para separar de su espalda las piernas, pies y columna de su gemelo parásito.
Cinco médicos cirujanos –de distintas disciplinas– del Advocate Children's Hospital participaron en la cirugía que ocurrió el 8 de marzo. En ella separaron del cuerpo de la pequeña Dominique, con apenas 10 meses de nacida, las partes de su gemelo que por un error genético se formó dentro de su hermana.
Dominique viajó desde Costa de Marfil, en África, a Estados Unidos, para someterse a esta intervención quirúrgica. Allí fue recibida por una madre sustituta, Nancy Swabb, quien a su vez fue sometida a un riguroso proceso de evaluación para asegurar que llevara a la bebé a todas las citas médicas en el hospital y que cumpliera con los protocolos médicos.
Un gemelo parásito es un bebé que queda dentro del cuerpo de su hermano y que no se separó durante el desarrollo de los embriones en el útero. En el caso de Dominique, su hermano dependía de su cuerpo, de su corazón y sus pulmones. La ocurrencia de estos casos es tan extraña que suelen tomar el nombre de sus pacientes.
Los médicos tardaron unas seis horas en desconectar completamente los nervios y vasos sanguíneos del gemelo parásito en el cuerpo de Dominique.
John Ruge, el médico que lideró la operación, dijo a los medios que entre los retos del caso estaba asegurar que la pequeña no quedara paralizada, pues las columnas de ambos niños se encontraban en el cuerpo de Dominique, muy cercanas una de la otra. Ruge habló además del esfuerzo que debía hacer la bebé para proveer de nutrientes a su gemelo esforzando por demás su pequeño corazón y sus pulmones. Era esta otra de las razones para separarlos.
"No es difícil imaginar que tiene dos piernas adicionales que salen de ella y se mueven, que están pegadas a su columna vertebral y su sistema nervioso", explicó Ruge al plantear los peligros tanto de la división como de que la bebé funcionara por dos personas de por vida. También explicó que de no haberse realizado la intervención, podría causarle serios problemas de columna a Dominique durante su crecimiento.
Otro de los médicos que participó, el pediatra especializado en cirugía reconstructiva Frank Vicari, aseguró que los avances de la medicina permitieron identificar los retos en la anatomía de Dominique. "Teníamos una cantidad de imágenes especializadas que nos permitirían identificar su anatomía naural, así como la del gemelo parásito y anticipar los problemas con los que podríamos encontrarnos", dijo. "Así minimizamos cualquier sorpresa durante la operación".
La recuperación de la pequeña marchó bien. Un día después de la intervención ya la sentaron y sacaba su lengua. Cinco días después ya había sido enviada a casa y los médicos no esperaban complicaciones adicionales.
Su madre sustituta dijo a los medios que la pequeña pronto regresará a África. "Ha tocado nuestros corazones, es un miembro de nuestra familia (...) Sabemos que debe volver con su amorosa familia, pero mantendremos el o. Esto ha cambiado nuestras vidas".