Aumenta el número de accidentes por ingesta de imanes entre niños
La cantidad de niños que ingieren imanes de tierras raras que se venden como un popular juguete de escritorio y son capaces de triturar los intestinos de un niño, se ha disparado en los últimos tres años desde que los tribunales bloquearon los esfuerzos de los reguladores federales para implementar medidas en la industria, que en gran medida tienen el poder de regularse a sí mismos.
Los centros de control de envenenamiento de EEUU están en camino de registrar seis veces más ingestas de imanes que en 2016, con un total de casi 1,600 casos este año. El aumento comenzó desde que en 2016 un tribunal federal se puso del lado de la industria para levantar la prohibición de cuatro años de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor sobre el producto. Los investigadores médicos dicen que la única explicación de este aumento es el regreso de estos imanes al mercado después del fallo judicial.
Ahora, con la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los Estados Unidos (SC) en gran medida marginada, los funcionarios de la industria del imán han lanzado un nuevo esfuerzo para prevenir lesiones y muertes de productos a través de estándares de seguridad voluntarios.
Usados para miles de productos de consumo, se supone que estos estándares voluntarios reflejan un equilibrio entre los intereses comerciales y de seguridad.
Pero durante la creación de normas voluntarias para imanes, las prioridades de los grupos de seguridad y los reguladores se han visto ahogado por los deseos de los fabricantes, que a menudo deciden qué opciones de seguridad se consideran y tienen una ventaja al votar sobre qué reglas entrarán en vigencia, de acuerdo con una revisión del Washington Post que incluyó escuchar horas de reuniones públicas de establecimiento de normas y obtener correos electrónicos sobre el proceso, junto con entrevistas y documentos.
Los problemas con los estándares de seguridad voluntaria se extienden más allá de los imanes, dicen los críticos, a otros productos para niños. En muchos casos, la SC no puede actuar hasta que las normas voluntarias hayan resultado inadecuadas.
Pero los defensores de la seguridad dijeron que el comité debería analizar cualquier cosa que pueda evitar accidentes.
Los fabricantes de imanes querían confiar solo en las advertencias escritas y diseños de envases para frenar las ingestas accidentales, de acuerdo con correos electrónicos y llamadas de conferencia del comité. Sin embargo, los defensores de la seguridad dijeron que eso no era suficiente. Querían que los imanes fueran demasiado grandes para tragar o demasiado débiles para causar daño a los órganos. Los imanes que se encuentran comúnmente en los juguetes de escritorio están formados a veces por cientos de bolas magnéticas, y tragar solo dos es una emergencia médica, dicen los médicos.
Shihan Qu, quien dirige la compañía que fabrica Zen Magnets, dijo en una entrevista que está de acuerdo en que los imanes de alta potencia son "un producto inherentemente peligroso. Eso es lo que es".
Qu dijo que apoya los esfuerzos para mantener los productos fuera del alcance de los niños. Pero no estuvo de acuerdo con las acciones que cambiarían fundamentalmente el producto o lo prohibirían. Anteriormente dirigió la lucha judicial contra la SC que resultó en la revocación de la prohibición de imanes en 2016.
"No puedes hacer grandes todas las cosas pequeñas para que los niños no se ahoguen con ellas", dijo Qu.
En 2011, la SC emitió su primera advertencia pública sobre el "peligro oculto" asociado con "estos imanes de aspecto inocente". Al año siguiente, mientras continuaban las ingestiones, la agencia aprobó regulaciones obligatorias que esencialmente prohibieron los conjuntos de imanes fuertes. La mayoría de las compañías acordaron dejar de venderlos. Pero dos empresas se negaron. La SC le pidió a un juez que obligara a un retiro contra ellos.
En 2016, un tribunal federal de apelaciones revocó la regla obligatoria de la agencia que servía como una prohibición de productos, criticando a la SC por "ambigüedades y complejidades críticas en los datos" que se usaban para justificar sus acciones. Entonces, a fines de 2016, por primera vez en cuatro años, los imanes de tierras raras eran legales para vender.
La repentina pérdida de la prohibición de 2016 no dejó regulaciones vigentes para los imanes de alta potencia. Qu pensó que esto era un problema.
Vio competidores vendiendo imanes sin ninguna advertencia. Sus imanes Zen se venden con advertencias que incluyen: "Estos imanes no son un juguete para niños". Solicitó a la SC que le pida que escriba una regla obligatoria que requiera etiquetas de advertencia y diseños de empaque para evitar que los niños usen el producto. Los grupos de seguridad se opusieron a su esfuerzo porque dijeron que no fue lo suficientemente lejos, según documentos y entrevistas.
Pero la SC se congeló, incapaz de ponerse de acuerdo sobre cómo buscar nuevas regulaciones a la luz de las decisiones judiciales, según Kaye, quien era el presidente de la agencia en ese momento. Un portavoz de la SC declinó hacer comentarios.
Cómo crear imanes más seguros
El proceso para crear estándares de seguridad voluntarios para la mayoría de los productos de consumo se maneja a través de ASTM International, una organización que ayuda a desarrollar estándares técnicos para miles de productos. Los funcionarios de ASTM dijeron que la organización enfatiza un enfoque de consenso diseñado para permitir a todas las partes la oportunidad de influir en el resultado.
Un miembro del personal de la SC escribió una carta al comité de imanes en octubre diciendo que la agencia no creía que las advertencias y los cambios de empaque fueran suficientes para abordar el peligro potencial.
Entonces Bryan Rudolph, un gastroenterólogo pediatra dijo que solo el incremento del tamaño de las bolas. "¿Qué tan grandes tendrían que ser para no ser tragados?" Rudolph preguntó.
La respuesta tenía 1.25 pulgadas de diámetro, un poco más pequeña que una pelota de ping-pong, pero también seis veces más grande que las bolas magnéticas existentes.
Qu, en un correo electrónico a los del comité, había dicho que había un problema práctico para hacerlos tan grandes: serían "tan fuertes que se cortarían los dedos si dos imanes se juntaran".
Eso provocó una discusión sobre formas de reducir la fuerza de los imanes. Pero los productores de imanes dijeron que eso no era técnicamente factible.
A principios de diciembre, los votantes del comité de imanes recibieron una boleta que contenía un estándar voluntario propuesto para los conjuntos de imanes. Los votos deben presentarse a principios de enero.
La nueva norma propuesta requeriría etiquetas de advertencia de seguridad y cambios de empaque, incluida una forma de verificar visualmente que todos los imanes sueltos estén dentro. Pero, si se aprueba, el estándar propuesto dejaría intactos los imanes. Seguirían siendo tan pequeños y poderosos como siempre.
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