Probamos al Rolls-Royce Dawn 2017 el convertible de lujo soñado por muchos
Uno de los mayores retos de ser periodista automotriz es adaptarme a cada uno de los vehículos que debo evaluar. Debo transformarme en el Jaime Gabaldoni representa la mentalidad y actitud de la persona promedio de cada segmento. En el caso del Rolls-Royce Dawn me transformé en el que sería parte del grupo de los súper-ricos, representada por solo el 2% de la clase más adinerada del planeta.
Solo basta con levantar la gran -y pesada- llave remota de cualquier Rolls-Royce moderno para activar el “modo-billonario” en uno, creando inmediatamente expectativas de perfección en todo aspecto del vehículo.
La apertura invertida de las enormes puertas con bisagra delantera estilo suicida descubren su precioso interior que inspira tranquilidad desde antes de subirse en él. Una vez postrado en los comodísimos asientos de piel solo necesito extender mi brazo izquierdo y presionar un botón para cerrar las puertas.
Una vez dentro de la cabina del Dawn, es difícil diferenciar su de instrumentos de los otros productos recientes de la marca inglesa. El detalle más evidente es en el nombre “Dawn” ubicado en finísimo reloj analógico en el central.
La combinación de tecnologías modernas como el sistema de interface, los sistemas de seguridad activa preventivos de accidentes entre otros, con detalles tradicionales como salidas metálicas del aire acondicionado , volante delgado, ceniceros, interruptores metálicos convierten a los Rolls-Royce a una especie única.
Opciones para su personalización son muy importantes por ello Rolls-Royce cuenta con la división Bespoke, encargada de satisfacer los pedidos y gustos más exigentes. ¿Quieres que el color del interior de tu Dawn sea el mismo del oso de peluche favorito de tu hija? ¿Quieres diamantes incrustados en el techo que se iluminen cuando tocas un botón? No hay nada imposible, pero todo tiene un precio.
Algunos rios “corrientes” que encontré en la unidad que probé fueron los paraguas alojados dentro de los guardafangos frontales ($1,500), las alfombras de piel de cordero ($2,000), etc.
Una vez que encendí su gran motor V12 twin-turbo de 6.6 litros, escondí su techo de lona a través de un interruptor en la parte baja de la consola central. El clima común de Miami es ideal para aprovecharlo, así que lo hice. Lo primero que llamó mi atención luego de avanzar pocas cuadras fue la tranquilidad de la cabina y bajos niveles de ruido generados por el viento. En ese momento fue que entendí que el Rolls-Royce Dawn es un escape, una forma de retiro de la realidad y de la tensión.
Su aceleración es bastante lineal y la transición entre cada una de sus ocho marchas resulta casi imperceptibles. El Dawn es un auto pesado (5,600 libras), pero los 550 caballos de potencia y 575 libras pie de torque son ideales para moverlo. El consumo de combustibles es elevado -por supuesto- pero queda claro que para el comprador promedio de este vehículo, ese no es un factor prioritario.
El precio base del Roll-Royce Dawn es $341,125 en EEUU y la unidad que tuvimos oportunidad de evaluar sumó $412,430. Puedes encontrar todos los detalles sobre mi experiencia A Bordo del Dawn en el video a continuación.