Las matemáticas del Senado: ¿cuántos votos necesitan los republicanos para cubrir la plaza de Ginsburg?
La senadora republicana de Alaska, Lisa Murkowski, declaró este domingo que se opone a aprobar una nominación presidencial a la Corte Suprema antes de que se realicen las elecciones, para las que faltan solamente 44 días.
A través de una declaración, citada por CNN, Murkowski se convierte en la segunda senadora republicana que muestra su desacuerdo con la posición mantenida por su líder en la Cámara Alta, Mitch McConnel, quien ha dicho que dispondrá la votación en cuanto el presidente presente su nominación.
"Durante semanas, he dicho que no apoyaría que se ocupara una posible vacante en la Corte Suprema tan cerca de las elecciones. Lamentablemente, lo que entonces era hipotético es ahora nuestra realidad, pero mi posición no ha cambiado", dijo Murkowski.
"No apoyé aceptar una nominación ocho meses antes de las elecciones de 2016 para llenar la vacante creada tras la muerte del juez Scalia. Ahora estamos aún más cerca de las elecciones de 2020, menos de dos meses antes, y creo que se debe aplicar el mismo estándar", añadió la senadora por Alaska, en referencia a un reclamo que hicieron los propios republicanos a los demócratas en 2016. En aquel momento, los demócratas aceptaron la petición y no se votó la nominación de Obama, que finalmente hizo Trump cuando entró a la Casa Blanca.
La oposición de Murkowski se suma a la de otra senadora importante, que suele ser una voz disidente dentro de su partido, en especial frente a las políticas y declaraciones más polémicas de Trump: Susan Collins, senadora por Maine, quien rápidamente mostró su oposición a esta decisión del presidente, respaldada por los republicanos.
"Dada la proximidad de las elecciones presidenciales, sin embargo, no creo que el Senado deba votar al nominado antes de la elección, escribió Collins en su cuenta de Twitter. "Para ser justos con el pueblo estadounidense, que estará ya sea reeligiendo al presidente o seleccionando a uno nuevo, la decisión de un puesto vitalicio en la Corte Suprema debería hacerla el presidente que salga electo el 3 de noviembre", añadió.
¿Cuántos votos en contra son necesarios?
Ya suman dos las intenciones de voto en contra en el Senado, de estrecha mayoría republicana. Para confirmar al nominado presidencial se necesita una mayoría simple de 51 votos a favor. Actualmente hay 53 republicanos y 47 demócratas en esa Cámara del Congreso, con lo cual, se necesitarían al menos 4 votos en contra de los republicanos para detener el proceso de confirmación.
Aún no se ha pronunciado al respecto Mitt Romney, de Utah, otro senador republicano a menudo crítico con Trump, quien podría empatar la votación 50-50. En este caso, el desempate lo tendría en su mano el vicepresidente Mike Pence, cuyo voto a favor de la nominación está garantizado.
Sin embargo, si hubieran dos votos más en contra de la apresurada confirmación, además de los de Collins y Murkowski, los demócratas tendrían la posibilidad de posponerla y entonces podrían trasladarla a lo que se conoce como "sesión del pato cojo", entre noviembre (después de las elecciones) y enero, antes de la toma de posesión del nuevo gobierno.
Murkowski no especificó hacia donde iría su voto de producirse en una llamada sesión del pato cojo, pasadas las elecciones.
La desmemoria de Lindsey Graham
Hace cuatro años y medio, cuando se desató la disputa por la nominación de Obama ante la vacante que dejó el magistrado Scalia tres su muerte, el senador Lindsey Graham, de Carolina del Sur, le propuso un desafío a sus colegas del senado: “Quiero que usen mis palabras en mi contra”, dijo entonces Graham y añadió: "Si sale un presidente republicano en 2016 y se produce una vacante en el último año de su primer mandato, se puede decir que Lindsey Graham dijo que dejemos que el próximo presidente, sea quien sea, haga esa nominación".
Sin embargo, este sábado, tras el anuncio de Trump de elegir un reemplazo para Ginsburg, Graham pareció olvidarse de sus propias palabras y se apresuró a prometer su apoyo a presidente en "cualquier esfuerzo por avanzar con respecto a la reciente vacante creada por el fallecimiento de la jueza Ginsburg".