Las dos cámaras del Congreso alcanzan un acuerdo para imponer nuevas sanciones a Rusia, en contra del criterio de Trump

Las dos cámaras del Congreso de EEUU llegaron este sábado a un acuerdo para imponer nuevas sanciones a Rusia por su supuesta injerencia en las elecciones estadounidenses y sus acciones en Ucrania, un plan que se votará esta semana y que dejará en una situación incómoda al presidente Donald Trump.
El plan, anunciado por sus negociadores en la Cámara Baja y el Senado, trata de sortear un veto de Trump al incluir en el mismo paquete nuevas sanciones a Irán y Corea del Norte, muy criticados por el mandatario.
La Cámara de Representantes tiene previsto votar el proyecto el próximo martes, y el Senado hará lo propio poco después, adelantó la oficina del líder mayoritario Kevin McCarthy.
La votación se hará bajo un procedimiento rápido reservado para proyectos de ley que cuentan con mucho respaldo, y se espera quese apruebe por una mayoría de dos tercios en ambas cámaras, un apoyo lo suficientemente amplio como para invalidar cualquier veto que Trump pudiera decidir imponer sobre la legislación.
En efecto, Trump solo podría levantar las sanciones a Rusia con la aprobación del Congreso, una condición que la Casa Blanca ha tratado sin éxito de eliminar del proyecto y que revela la desconfianza de muchos legisladores en el criterio del mandatario en lo que a Moscú se refiere.
El principal demócrata del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Ben Cardin, citado por Politico, elogió el acuerdo el sábado.
"Creo que los cambios propuestos al proyecto de ley han ayudado a aclarar la intención de los del Congreso, así como a expresar solidaridad con nuestros aliados más cercanos en la lucha contra la agresión rusa y responsabilizar al Kremlin por sus actividades desestabilizadoras", dijo Cardin en un comunicado.
Chuck Schumer, del mismo comité, agregó en otro comunicado que "dadas las muchas transgresiones de Rusia y la aparente incapacidad del presidente Trump para lidiar con ellas, es esencial tener una ley de sanciones fuerte como la que se ha acordado".
En cuanto a Irán, el proyecto de ley impone sanciones financieras y prohíbe la entrada a EEUU a personas implicadas en el programa de misiles balísticos de Irán y a aquellos que negocien con ellos.
La ley también obligaría al Gobierno estadounidense a aplicar sanciones a la Guardia Revolucionaria de Irán por su "apoyo del terrorismo" y a sancionar a violadores de derechos humanos.