Una fila de vehículos voladores cargados con personas sobre el río Támesis de Londres, Reino Unido, una de las ilustraciones que describen cómo podría ser mundo en el año 2069. Seis de los principales académicos y futurólogos de ese país trabajaron en equipo para imaginar cómo la tecnología modelará el planeta en los próximos 50 años y entre sus conclusiones encontraron que una de las áreas que tendrá mayores cambios será la forma cómo los humanos se desplazan y los lugares hasta dónde podrán llegar. Crédito: Taylor Herring/Samsung KX/EFE
Este trabajo, auspiciado por la tecnológica surcoreana
Samsung, predice que en 2069 “los viajes irán más arriba, más abajo e incluso hacia las estrellas”. Adelanta que se crearán autopistas submarinas, por las que circularán cápsulas a través de un sistema de tubos. Estas vías bajo el agua, proyectadas en línea recta y sin los obstáculos de la variada superficie terrestre, realizarian conexiones muy rápidas entre Reino Unido y Europa continental, por ejemplo. Crédito: Taylor Herring/Samsung KX/EFE
Los autores también adelantan que en las ciudades circularán taxis y autobuses aéreos: unos vehículos voladores no tripulados de alta potencia que viajarán encima del tráfico terrestre y sobre ríos y vías fluviales, para crear rutas despejadas a través del cielo. En la foto Franky Zapata, el deportista y empresario francés que desarrolló un aparato con el que cruzó volando de Francia a Reino Unido sobre el Canal de la Mancha, en agosto de 2019. Crédito: Michel Spingler/AP
En 50 años la mayoría de los viajes internacionales se realizarán en cohetes reutilizables que saldrán al espacio cercano en las inmediaciones de la atmósfera superior. Viajarán a menos de 20,000 millas por hora y podrán llevarnos de Londres a Nueva York en menos de 30 minutos. La fotografía es del
prototipo de la nave Starship, de la compañía SpaceX, que comenzará a llevar personas al espacio en los próximos años. Crédito: Loren Elliott/Getty Images
La impresión de tejidos humanos en 3D proporcionará reemplazos para personas cuyos órganos estén dañados y sin posibilidades de reparación, y que podrían superar la calidad de aquellos órganos originales. Trasplantes de ojos especializados para la visión nocturna, o de corazones y pulmones capaces de aumentar el rendimiento de un atleta, serán comunes en 2069. En la fotografía, tomada en abril de 2019, científicos de Israel muestran una impresión en 3D de un corazón con tejido humano. Crédito: Jack Guez/AFP/Getty Images
Según los especialistas en 2069 será común que los insectos sean una de las principales fuentes de proteínas. En agosto de 2017 salió al mercado en Suiza una hamburguesa a base de insectos luego de que ese país hiciera una revisión de las leyes de seguridad alimentaria. Según este estudio en 50 años las personas contarán con dispositivos que monitorearán la salud y la nutrición, para proporcionar información relevante de manera inmediata. Crédito: Fabrice CofriniAFP/Getty Images
Según este informe en 50 años serán comunes nuevas formas de entretenimiento, deportes en los que los atletas vuelan en aerodeslizadores, y películas y videojuegos interactivos que además de verse en tres dimensiones crearán crearán sensaciones táctiles. Crédito: Taylor Herring/Samsung KX/EFE
Un hotel espacial, otro de los dibujos que surgieron del informe. Según los pronósticos de los futurólogos británicos, en 2069 serán habituales las vacaciones en el espacio, para las cuales habrá hoteles de lujo que orbitarán la Tierra y otros planetas generando su propia gravedad, En junio de 2019 la NASA anunció que, por primera vez, permitirá que los civiles visiten la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés), a través de viajes especiales que serán comercializados por empresas particulares. Crédito: Taylor Herring/Samsung KX/EFE
También predicen que para esa época podremos vivir y trabajar en 'rascacielos subterráneos’, unas edificaciones similares a torres invertidas, que se hundirán muchas plantas en el subsuelo, siendo resistentes a los terremotos, y que se generalizará la autolimpieza de las casas y oficinas, utilizando tecnología robótica. Crédito: Taylor Herring/Samsung KX/EFE
En la fotografía el científico y presentador de televisión británico Greg Foot, junto a algunas de las ilustraciones que surgieron del estudio. Los autores del informe son Jacqueline de Rojas, presidenta de techUK; el doctor Rhys Morgan, director de Ingeniería y Educación en la Real Academia de Ingeniería; y el profesor Dale Russel, asesor especialista en innovación de ingeniería de diseño en el Royal College of Art, junto con los futurólogos Morgaine Gale, Maneesh Juneja y Matthew Griffin. Taylor Herring/Samsung KX/EFE