Por qué esta podrá ser la semana “más caliente nunca vista” en EEUU ( y por qué este "infierno" se puede volver “la nueva normalidad”)
El sur de Estados Unidos vive días de altas temperaturas con cifras récord que podrían convertir a julio de 2023 en el mes más caluroso jamás registrado en el país, una semana después de que la temperatura promedio del planeta rompió récords por tres días seguidos.
La llegada de El Niño combinada con la aceleración del cambio climático causaron que un domo de calor expansivo se posara sobre el suroeste del país. Se espera que se extienda durante la semana hasta cubrir el sur de la nación de costa a costa, lo que el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) estimó que podría llevar esta semana "a temperaturas récord nunca antes vistas".
De hecho, el NWS pronosticó que el presente mes podría ser el más caluroso de la historia en EEUU.
Para agravar aún más la situación, no se espera que el calor ceda en agosto y algunos expertos creen que estas temperaturas peligrosamente altas podrían convertirse en la nueva situación normal para los veranos de Estados Unidos en los años por venir debido al cambio climático.
Ya desde el año pasado, la Organización Meteorológica Mundial (OMM), una dependencia de Naciones Unidas responsable de promover la cooperación internacional en ciencia atmosférica, climatología, hidrología y geofísica, advirtió que estas intensas olas de calor se podrían convertir en la nueva normalidad.
Petteri Taalas, secretario general de la OMM, advirtió que “las olas de calor ocurrirán con más frecuencia debido al cambio climático” asegurando que “la conexión ha sido claramente demostrada por el Intergubernamental sobre el Cambio Climático”.
Según Taalas “hemos bombeado tanto dióxido de carbono a la atmósfera que la tendencia negativa continuará durante décadas”, quien expresó la esperanza de que la crisis se convierta en “una llamada de atención para los gobiernos y que tenga un impacto en la intención de voto en los países democráticos”.
Calor avasallante en Arizona
Arizona es representativa de lo que le espera al sur del país esta semana.
Después de una semana de temperaturas récord, el NWS emitió una advertencia sobre una ola de calor excesivo para toda el área metropolitana de Phoenix y sus alrededores.
Según la advertencia, las temperaturas en la semana que inicia oscilarán en los máximos de 113 a 118 °F el miércoles y jueves y agregó que hay una probabilidad de entre el 5% y el 10% de alcanzar los 120 °F.
La temperatura récord en el área de Phoenix es de 121 °F, alcanzada el 28 de julio de 1995.
"La configuración atmosférica... también parece tener similitudes con las condiciones del 28 de julio de 1995, que llevaron a Phoenix a alcanzar los 121 °F y a Yuma a los 124 °F", dijo el NWS.
El NSW advirtió que incluso si no se alcanzan las temperaturas máximas predichas, “ esta ola de calor actual debería convertirse en una de las más largas, o quizás la de mayor duración que haya sufrido el área”.
La semana anterior se registraron temperaturas que en promedio fueron cinco grados por encima de lo normal en el área de Phoenix a unos pocos grados por encima de lo normal en los desiertos del oeste.
“Estamos bastante seguros de que este calor empeorará aún más la próxima semana”, dijo comunicado del NWS agregando que a partir del martes y por el resto de la semana, las temperaturas en toda la región pueden llegar a ser algunas de las más altas que jamás hayamos visto”.
Calor en Texas y en Florida
En Texas, el calor estará combinado con una fuerte humedad, por lo que si bien es posible que las temperaturas no establezcan nuevos récords, el calor no será menos avasallante.
La mayor parte de Texas verá temperaturas cercanas a los 100 °F, pero la humedad hará que se vivan índices de calor percibido de entre 105 °F a 110 °F durante la mayor parte de la semana en Dallas, San Antonio, Waco, Austin y Houston. En la parte más sur de Texas, donde se encuentran por ejemplo McAllen, podría ver índices de calor cercanos a los 115F.
En el sur de Florida, otra área donde se espera un calor inusual, también la humedad causará una gran diferencia entre el calor real y el índice de calor percibido.
Durante todos los días de la semana anterior, Miami vio un índice de calor de 104 °F y no se espera que esa situación cambie esta semana.
El índice de calor percibido de Miami, que ha permanecido sobre los 100 °F durante los últimos 30 días, alcanzó el lunes 110 °F a la 1:00 pm, convirtiéndose en el 5 día consecutivo que supera los 105 °F , una situación sin precedentes, según dijo en Twitter Brian McNoldy, investigador asociado principal de la Universidad de Miami.
McNoldy hizo notar también que las temperaturas del agua en la costa de Florida son mucho más altas de lo normal, lo que podría intensificar la ola actual de calor y podrían hacer que la temporada de huracanes se haga peor de lo originalmente predicho.
“Ok, no estoy seguro de haber visto el agua alrededor de Florida así antes... en cualquier época del año” dice un tuit de McNoldy junto a un mapa que muestra temperaturas de la superficie marina de hasta 90 °F en el área de los cayos de Florida.
Cómo enfrentar la ola de calor
El NWS advirtió que es "esencial" que los habitantes de las áreas afectadas tomen precauciones para enfrentar " condiciones de calor muy peligrosas y potencialmente mortales".
El NWS llamó a mantenerse hidratado y usar aire acondicionado cuando sea posible ya que los ventiladores podrían no ser adecuados; cancelar actividades al aire libre en horas del día; usar ropa ligera y holgada y estar pendientes de personas mayores, niños y mascotas.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan estar pendientes de los signos y síntomas de advertencia de enfermedades relacionadas con el calor como pulso rápido y fuerte, dolores o espasmos musculares, mareos, desmayos, piel caliente, roja, seca o húmeda, náuseas, y sarpullido por calor, o grupos rojos de pequeñas ampollas similares a granos en la piel.
El NWS llamó a “ no subestimar los peligros de esta ola de calor de larga duración” y advirtió que existe un “riesgo muy alto” de enfermedades relacionadas con el calor para quienes no tomen medidas para protegerse.