Lorella Praeli liderará la lucha de ACLU en inmigración

La noche en que Donald Trump ganó la elección presidencial, Lorella Praeli quedó en shock. Llevaba siete años trabajando como activista a favor de los dreamers, habían logrado que centenares de miles de ellos quedaran protegidos bajo DACA y ella esa noche era la directora de voto latino de Hillary Clinton, que había perdido estrepitosamente.
Sintió decepción, tristeza, pero también esperanza. Praeli, que vivió 14 años sin documentos en Estados Unidos, dice que su padre le enseñó a preguntarse dónde puede tener el mayor impacto en cada momento. Ahora, bajo la política migratoria de la istración Trump, asegura haber encontrado su sitio. El que le da esperanza.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU), una de las mayores organizaciones activistas del país, anunció este viernes el fichaje de Lorella Praeli para liderar sus campañas, programas y políticas de inmigración, un asunto que se ha vuelto central en la estrategia de esta organización no partidista.
"ACLU ha estado desarrollando su capacidad para poder luchar en este momento concreto", dijo Praeli, de 28 años, a Univision Noticias. "En las cortes, en las legislaturas estatales y también está organizando un departamento para organizar la sociedad civil".
La organización recaudó desde las elecciones 80 millones en donaciones online, más de lo habitual, según datos que ACLU dio a Univision Noticias en marzo . El número de se triplicó en tan solo cuatro meses, de 500,000 a 1.5 millones. Y más que eso.
ACLU fue la organización que logró que una jueza federal respondiera contra el veto migratorio de Trump y bloqueara parte de esa orden ejecutiva tan polémica. Fue un momento clave que impulsó el rol del organismo a escala nacional e internacional.
Su nueva líder en inmigración, Praeli, nació en Perú, perdió a los 2 años una pierna en un accidente y llegó a Estados Unidos con 10 años en búsqueda de un tratamiento médico. Su madre, psicóloga antes de emigrar, encontró empleo en la economía informal como limpiadora en Connecticut.
Ella sí logró entrar en Quinnipiac University, donde se graduó con la mayor cualificación posible en Ciencias Políticas, summa cum laude, y donde también se forjó como una activista a favor de los jóvenes indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo niños: los dreamers.
De hecho, cuando el movimiento dreamer tomó fuerza, ella fue una de las primera en dar un paso adelante y anunciar que vivía sin papeles en este país.
Desde la organización United We Dream, donde fue directora de políticas y activismo, luchó por una reforma migratoria integral y presionó para que el presidente Barack Obama firmara una protección temporal para los dreamers, el programa llamado DACA, en 2012.
Ese mismo año, Praeli logró regularizar su situación al casarse con su novio. Primero obtuvo la green card y ahora ya es ciudadana estadounidense.
En 2016 se convirtió en la directora de voto latino de la candidata demócrata, Hillary Clinton, pese no haber votado nunca en una elección.
Le preguntamos en qué fallaron los demócratas con los latinos y contesta: "Es un trabajo que no solo se puede hacer en campaña". Para Praeli, los 4 años anteriores se tiene que movilizar el electorado y registrarlo para votar.
Cree que, ahora más que nunca, la sociedad estadounidense está dispuesta a luchar por dar una respuesta a los retos en inmigración.