Así fue el primer vuelo de "autodeportación" con 64 inmigrantes desde EEUU a Honduras y Colombia
Un primer vuelo de inmigrantes que escogieron adherirse al proceso de "autodeportación" promovido por el gobierno de Donald Trump arribó este lunes a Honduras y Colombia desde Texas, con unos 60 indocumentados a bordo, informó el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
"Hoy, DHS realizó un vuelo chárter voluntario desde Houston, Texas, a Honduras y Colombia, trayendo a 64 participantes que optaron por autodeportarse de regreso a sus países de origen. Este vuelo chárter es una de las primeras acciones que ha tomado el Departamento para cumplir con la reciente proclamación del Presidente Trump de crear el Proyecto Regreso a Casa", indicó un comunicado.
En el vuelo iban 38 hondureños, incluyendo 19 niños, cuatro de ellos nacidos en territorio estadounidense, y otros 26 fueron luego llevados a Colombia.
DHS no dio cifras sobre el costo del vuelo, que fue pagado con dinero de los contribuyentes de EEUU. Hasta la noche del lunes, el gobierno de Colombia no había confirmado la "autodeportación".
Todos los "autodeportados" decidieron dejar el país a través la aplicación CBP Home del departamento de Seguridad Nacional, que además entregó 1,000 dólares para cada una de las personas, incluidos los niños.
El vicecanciller hondureño, Antonio García, recibió a los inmigrantes en el aeropuerto de San Pedro Sula, y confirmó que cuatro de los niños nacieron en Estados Unidos y uno en México.
Los viajeros también se beneficiaron del programa del gobierno hondureño "Hermano, Hermana, Vuelve a Casa", que incluye "un bono adicional de 100 dólares para los mayores de 18 años, vales de comida y ayuda para encontrar empleo", informó el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
Esto fue refrendado por el vicecanciller García, quien agregó que también tendían el equivalente a 200 dólares en crédito para comprar bienes básicos en tiendas gubernamentales en Honduras.
Wilson Sáenz, de 22 años, relató a la AFP que había emigrado en septiembre pasado desde Puerto Cortés, en el Caribe hondureño, en busca de mejores condiciones de vida. Estaba en Texas, donde trabajaba ocasionalmente en construcción.
Explicó que optó por autodeportarse porque "ya no había trabajo". Sin embargo, dijo que va a solicitar visa para poder regresar a Estados Unidos.
También volvió a Honduras Iris Díaz, de 32 años, con sus dos hijos, de 9 y 5 años, quien tomó esta decisión después de que fuera deportado su marido.
"Ya viéndose sola ella allá, tomó la decisión de autodeportarse", explicó su padre, Ernesto Díaz, de 65 años.
El DHS dijo que "se trató de un vuelo chárter voluntario, no de una operación policial del ICE. A todos los participantes se les ofrecieron los mismos beneficios que a cualquier extranjero ilegal que se autodeporta utilizando la aplicación CBP Home".
Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional, afirmó en el boletín que los inmigrantes indocumentados que no retornen voluntariamente a sus países de origen serán "sometidos a multas, arresto, deportación y nunca se le permitirá regresar".