El Gobierno asesora en seguridad a la comunidad judía en EEUU después de varios ataques

Las autoridades estadounidenses están ofreciendo asesoría en materia de seguridad a la comunidad judía tras una serie de amenazas, desde la llegada de Donald Trump al poder, y ataques como los recientes destrozos de tumbas en dos cementerios de esta comunidad.
El secretario del Departamento de Seguridad Interior (DHS), John Kelly, indicó que “debido a la naturaleza de las amenazas a los Centros Comunitarios Judíos” su departamento está asesorando a agrupaciones de la comunidad judía y ofreciéndoles medidas de protección ante el aumento de estos incidentes de odio.
El DHS cuenta con equipos de Asesores de Seguridad Protectora en los 50 estados “que sirven de enlace con el gobierno, la industria y líderes comunitarios, y quienes aportan experiencia en medidas de protección, notificación de amenazas y sensibilización sobre amenazas”, indicó en un comunicado.
Los asesores ofrecerán apoyo “en términos de entrenamiento, medidas de protección, ejercicios y en compartir información”, añadió.
Esta iniciativa cuenta también con expertos antiterroristas que también han proporcionado información a las agrupaciones judías sobre la ayuda federal disponible ante situaciones como esta.
Al menos 100 centros y escuelas de entidades judías en 33 estados han notificado amenazas de bombas o de otro tipo desde que comenzó este año.
El pasado fin de semana, unos vándalos rompieron y derribaron más de 500 lápidas en un cementerio judío en Filadelfia, Pensilvania.
El ataque tuvo lugar una semana después de que otras 100 lápidas fueran dañadas en otro cementerio judío en St Louis, Missouri, que posteriormente visitó el vicepresidente, Mike Pence, en un gesto de solidaridad con la comunidad afectada.
Después de varios días de silencio tras el ataque en Missouri y ante las críticas suscitadas, Trump calificó como “horribles” y “dolorosos” los crecientes casos de antisemitismo registrados en el país.
Durante su discurso al Congreso el martes, Trump criticó las recientes amenazas contra centros judíos y condenó la matanza aparentemente motivada racialmente de un inmigrante indio en Kansas City.
Esos ataques “nos recuerdan que aunque somos una nación dividida por la política, somos un país que se presenta unido en la condena al odio y al mal en todos sus formas”, dijo Trump.
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