EEUU ya no es triple A: pierde la última calificación de crédito perfecto que le quedaba
La agencia Moody's rebajó el viernes la calificación crediticia de Estados Unidos del máximo AAA a AA1, un escalón por debajo, una decisión que justificó por el aumento de los niveles de la deuda pública y su costo para el presupuesto federal.
Moody's destacó en un comunicado "el aumento, durante más de una década, de los ratios de deuda pública y pago de intereses a niveles significativamente superiores a los de países con calificaciones similares".
También modificó la perspectiva de Estados Unidos de negativa a estable.
En su comunicado la agencia indica que "esperamos que el déficit federal se amplíe, llegando a casi el 9% del PIB para 2035, frente al 6,4% en 2024, impulsado principalmente por el aumento de los pagos de intereses de la deuda, el aumento del gasto en prestaciones sociales y una generación de ingresos relativamente baja".
“No creemos que las propuestas fiscales actuales bajo consideración resulten en reducciones significativas plurianuales del gasto obligatorio y del déficit”, dijo en referencia a la llamada "grande y hermosa ley" de presupuesto que consideran los republicanos en el Congreso y que este viernes se vio bloqueada en su avance por la oposición de varios republicanos conservadores fiscales.
Las tres grandes agencias ya no consideran a EEUU triple A
Moody's es la última de las tres principales agencias de calificación crediticia en rebajar la calificación crediticia del gobierno federal. Standard & Poor's rebajó la calificación de la deuda federal en 2011 y Fitch Ratings hizo lo mismo en 2023.
Moody’s se refirió específicamente al deseo de extender las rebajas de impuestos adoptadas bajo el gobierno de Trump en 2017, estimando que una prórroga añadiría 4 billones de dólares al déficit durante la próxima década.
“Las sucesivas istraciones y el Congreso de EE. UU. no han logrado un acuerdo sobre medidas para revertir la tendencia de grandes déficits fiscales anuales y el aumento de los costos de los intereses”, afirma el informe de Moody’s.
Sin embargo, destaca la agencia calificadora que Estados Unidos "mantiene fortalezas crediticias excepcionales, como el tamaño, la resiliencia y el dinamismo de su economía y el papel del dólar estadounidense como moneda de reserva global".
Pese a las evaluaciones más bajas de las agencias de calificación, es probable que los inversores adquieran rápidamente la deuda del gobierno estadounidense.
Esto refleja la condición del dólar como moneda de reserva global, lo que significa que personas de todo el mundo quieren depositar sus ahorros en bonos del Tesoro estadounidense, incluso mientras el gobierno acumula cada vez más deuda.