{ "@context": "http://schema.org", "@type": "BreadcrumbList", "itemListElement": [ { "@type": "ListItem", "position": 1, "item": { "@id": "/noticias", "name": "Noticias Univision" } }, { "@type": "ListItem", "position": 2, "item": { "@id": "/noticias/estados-unidos", "name": "Estados Unidos" } } ] }
null: nullpx
Univision Noticias
Estados Unidos
    Educación

    Harvard desafía a Trump y pone a prueba hasta dónde puede llegar el poder presidencial

    Harvard se convirtió la semana pasada en la primera universidad en desafiar abiertamente las exigencias de la istración de Donald Trump por cambios radicales para limitar el activismo en sus campus.
    Publicado 20 Abr 2025 – 10:58 AM EDT | Actualizado 20 Abr 2025 – 11:02 AM EDT
    Comparte
    Cargando Video...

    De un lado está Harvard, la universidad más antigua y rica del país, con una marca tan poderosa que su nombre es sinónimo indiscutible de prestigio. Del otro lado está el gobierno de Donald Trump, decidido a ir más lejos que cualquier otra istración para reformar la educación superior en Estados Unidos.

    Ambas partes se enfrentan en una pulseada que podría poner a prueba los límites del poder del gobierno y la independencia que ha hecho de las universidades estadounidenses un destino para académicos de todo el mundo.

    Harvard se convirtió el lunes pasado en la primera universidad en desafiar abiertamente las exigencias de la istración por cambios radicales para limitar el activismo en sus campus. La universidad enmarca las demandas del gobierno como una amenaza no solo para esa institución, sino para la autonomía que la Corte Suprema ha otorgado durante mucho tiempo a las universidades estadounidenses.

    "La universidad no cederá su independencia ni renunciará a sus derechos constitucionales", escribieron el lunes los abogados de la universidad al gobierno. "Ni Harvard ni ninguna otra universidad privada pueden permitirse ser tomadas por el gobierno federal", agregaron.

    El gobierno federal ha dicho que congelará más de 2,200 millones de dólares en subvenciones y 60 millones de dólares en contratos a Harvard. La retención de fondos marca la séptima vez que la istración de Trump ha tomado tal medida en una de las universidades más elitistas del país, en un intento de forzar el cumplimiento de la agenda política del presidente. Seis de las siete escuelas están en la llamada Ivy League.

    Harvard está en un sitial que le permite enfrentar al gobierno de Trump

    Ninguna universidad está mejor posicionada para dar la pelea que Harvard, cuya dotación de 53,000 millones de dólares es la más cuantiosa del país. Pero al igual que otras grandes universidades, Harvard también depende de la financiación federal para impulsar sus esfuerzos de investigaciones científicas y médicas. No está claro cuánto tiempo podría continuar Harvard sin el dinero frenado por el gobierno.

    La firmeza de Harvard parece que está permeando en otras instituciones.

    Después de aceptar inicialmente varias demandas de la istración de Trump, la presidenta interina de la Universidad de Columbia adoptó recientemente un tono más desafiante en un mensaje a sus estudiantes: dijo que algunas de las demandas "no están sujetas a negociación".

    En su declaración, Claire Shipman declaró que leyó lo determinado por Harvard con "gran interés".

    "Harvard es obviamente una institución particularmente poderosa. Y su decisión tiene el potencial de galvanizar a otras universidades en algún tipo de resistencia colectiva", indicó David Pozen, profesor de Derecho de Columbia para quien las demandas del gobierno son "ilegales".

    Trump amenazó el martes pasado con escalar la disputa, sugiriendo en redes sociales que Harvard debería perder su estatus de exención de impuestos “si sigue promoviendo 'enfermedades' políticas, ideológicas que apoyan/inspiran a terroristas”.

    El enfrentamiento plantea interrogantes sobre hasta dónde está dispuesta a llegar la istración de Trump. Es probable que se produzca una batalla legal. Un grupo de profesores ya ha presentado un desafío legal contra las demandas y muchos en la esfera académica esperan que Harvard también presente su propia demanda judicial.

    En su carta de rechazo a lo pedido por el gobierno, Harvard señaló que esas exigencias violan los derechos de la Primera Enmienda y otras leyes que amparan los derechos civiles.

    El primer gran obstáculo en la ofensiva contra las universidades

    Para la istración de Trump, Harvard representa el primer gran obstáculo en su intento de forzar cambios en las universidades que, según los republicanos, se han convertido en focos de liberalismo y antisemitismo.

    El conflicto está tensando la relación de larga data entre el gobierno federal y las universidades que utilizan dinero federal para impulsar avances científicos. Visto durante mucho tiempo como un beneficio para el bien común, ese dinero se ha convertido ahora en una suerte de 'arma' para el gobierno.

    El dinero federal es una inversión y no un derecho, escribieron funcionarios federales en una carta a Harvard la semana pasada, acusando a la institución de no cumplir con las obligaciones de derechos civiles que son una condición para la ayuda federal. Argumentaron que Harvard ha permitido que la ideología política afecte la creatividad intelectual.

    La campaña de Trump ha apuntado a instituciones acusadas de tolerar el antisemitismo en medio de una ola de protestas propalestinas en campus de todo el país. Algunas de las demandas del gobierno tocan directamente ese activismo, pidiendo a Harvard que imponga una disciplina más estricta a los manifestantes y que indague en los estudiantes internacionales para detectar a aquellos que son "hostiles a los valores estadounidenses".

    Otras demandas ordenan a Harvard que cese todos los programas de diversidad, equidad e inclusión, y que termine con las prácticas de isión o contratación que tomen en consideración "raza, color, origen nacional o sus equivalentes".

    El presidente de Harvard, Alan Garber, dijo que las demandas exceden la autoridad del gobierno. Escribió en un mensaje a su comunidad universitaria que “ningún gobierno, independientemente de qué partido esté en el poder, debería dictar lo que las universidades privadas pueden enseñar, a quién pueden itir y contratar, y qué áreas de estudio e investigación pueden seguir".

    Algunos conservadores han sugerido que si Harvard quiere independencia debería seguir el ejemplo de las universidades que renuncian a la financiación federal para estar libres de la influencia del gobierno. Hillsdale College, una pequeña escuela conservadora en Michigan que es uno de los ejemplos más prominentes, bromeó en las redes sociales que Harvard podría convertirse en el 'Hillsdale del este'.

    "No aceptar dinero de los contribuyentes debería ser el próximo paso de Harvard", dijo la escuela.

    Ese es un escenario poco probable, pero Harvard podría tener que encontrar otras formas de afrontar los recortes de financiación del gobierno. Harvard generalmente destina anualmente alrededor del 5% de su dotación a las operaciones de la universidad, cerca de un tercio de su presupuesto total, según documentos de la institución.

    La universidad podría usar más fondos de su dotación, pero las universidades generalmente tratan de evitar gastar más del 5% para proteger las ganancias que le resultan al invertir ese dinero. Al igual que otras escuelas, Harvard está limitada en cómo gasta el dinero de la dotación, gran parte del cual proviene de donantes que especifican cómo quieren que se use.

    El gobierno no ha dicho públicamente qué subvenciones y contratos están siendo congelados, pero si la universidad tiene que sobrevivir con poco financiamiento federal por un período prolongado, probablemente tendrá que hacer recortes.

    "Todas las universidades necesitan preveer para esta situación y pensar en cómo pueden sobrevivir en una forma más austera en los próximos años", dijo Pozen.

    Entre los que aplaudieron la decisión de Harvard está el expresidente Barack Obama, quien la calificó como un rechazo al "torpe intento del gobierno de reprimir la libertad académica".

    "Esperemos que otras instituciones sigan su ejemplo", comentó en las redes sociales.

    Una declaración del Republican Club de Harvard imploró a la universidad que llegara a una resolución con el gobierno y "regresara a los principios estadounidenses que formaron a los grandes hombres de esta nación".

    Mira también:

    Cargando Video...
    Estudiantes protestan contra la Universidad de Columbia por “complicidad con autoridades migratorias”
    Comparte
    Widget Logo