Samsung: primero explotaron los teléfonos y ahora son sus lavadoras
Las autoridades estadounidenses alertaron de "problemas de seguridad" en el uso de determinados modelos de lavadoras de la marca Samsung. Esta nueva alerta contra productos de la firma surcoreana se produce dos semanas después de que se realizara un llamado inmediato para retirar del mercado el Samsung Galaxy Note 7 por explosiones de las baterías.
La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos (SC, en inglés) advirtió en un comunicado sobre la utilización de lavadoras fabricadas entre marzo de 2011 y abril del 2016 pero no especificó los modelos defectuosos.
La SC pidió a los consumidores usar el ciclo para ropa delicada cuando laven sábanas, ropa resistente al agua y prendas grandes ya que la "centrifugación a baja velocidad en el ciclo para ropa delicada reduce el riesgo de heridas o el daño en la propiedad".
Este nuevo golpe para Samsung llega tras varias demandas (una en marzo y otra en agosto) interpuestas contra la compañía por los desperfectos que algunas de sus lavadoras causaron a varios clientes. Según los documentos judiciales, Suzann Moore (de Indiana), Michelle Soto Fielder (de Texas) y Melissa Thaxton (de Georgia) tuvieron graves problemas cuando estaban lavando sus ropas.
Moore había estado usando su lavadora por dos años sin incidentes pero el 23 de diciembre de 2015, al poco de apretar el botón para que comenzara el ciclo, explotó su electrodoméstico con tal fuerza que también se vio afectada la secadora situada al lado (de la marca Samsung, por cierto).
Como "si una bomba explotara"
El 9 de febrero de 2016, Soto decidió colocar unas cuantas ropas en la lavadora. Pese a que había necesitado a veces mantenimiento, su modelo no había presentado problemas mayores. Hasta ese día: al poco de empezar a funcionar se produjo una explosión que hizo pensar a Soto que "algo había caído sobre su casa y había atravesado el techo". La lavadora salió despedida con tanta fuerza que se estrelló con la pared e hizo un agujero que se podía ver desde la habitación de al lado.
Algo similar vivió Thaxton: el 8 de abril de 2016, ella y su hija de cuatro años se encontraban junto a la lavadora cuando estalló en el momento del centrifugado. Fue como "si una bomba explotara". Las imágenes presentadas en la denuncia muestran que la tapa superior del electrodoméstico quedó completamente despegada. Resultado: cuantiosos desperfectos en la casa.
Según las autoridades estadounidenses, Samsung está cooperando para buscar una "solución" para los s con problemas. La compañía ha reconocido, en un comunicado, que "en escasos casos, unidades afectadas pueden experimentar irregulares vibraciones que podrían causar heridas personales o daños en la propiedad". Samsung ha ofrecido un el teléfono 844-483-3881 ante cualquier duda.
Este revés se suma a los que está padeciendo la compañía por su modelo Samsung Galaxy Note 7. Las baterías de este modelo pueden sobrecalentarse e incendiarse lo que representa "un serio peligro de quemadura para los consumidores", dijo la SC, que hizo un llamado para retirarlo del mercado. En el momento en el que los reguladores decidieron no permitir el uso del Galaxy Note 7 se habían reportado 92 baterías estalladas, con 26 casos de quemaduras a personas y 55 propiedades incendiadas.
Antes de que los teléfonos fueran retirados, Samsung había pedido a los s de este modelo que lo dejaran de utilizar y lo canjearan cuanto antes.
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