Venezuela cae en el impago parcial de su deuda externa

Después de días de especulaciones tras el vencimiento de los plazos dados al Gobierno de Venezuela para el pago de los intereses en dos bonos, la calificadora crediticia estadounidense Standard & Poors (S&P) rebajó este lunes la deuda soberana venezolana en moneda extranjera en impago parcial ("selective default"), tras incumplir el abono.
La agencia es la primera en hacer una calificación como ésta sobre Venezuela, cuya economía se encuentra al borde del colapso, con una inflación de tres dígitos y serios problemas de flujo de caja.
La calificadora explicó que las autoridades venezolanas no abonaron 200 millones de dólares de los cupones correspondientes de bonos globales emitidos con vencimiento en 2019 y 2024, después de que este fin de semana se cumplieran los 30 días del período de gracia.
En consecuencia, colocó en grado SD/D ("selective default/default") la deuda soberana de Venezuela a largo y corto plazo en moneda extranjera, anunció la firma en un comunicado.
Café y chocolate
La compañía estadounidense hizo el anuncio horas después de que un grupo de acreedores acudieran a Caracas a una reunión para tratar una posible reestructuración de la deuda externa del país, que asciende a unos 150,000 millones de dólares.
A la cita acudieron acreedores de Venezuela, Estados Unidos, Panamá, Reino Unido, Portugal, Colombia, Chile, Argentina, Japón y Alemania, a los que se les obsequió con una colorida bolsa con café y chocolate venezolano pero poco más se llevaron de la reunión a la que el Gobierno venezolano acudió sin un plan concreto.
"No hubo una oferta, unos plazos, una estrategia, nada", dijo uno de los participantes a Reuters al salir del encuentro que a penas duró media hora.
Pese a la decepción de los inversionistas, el gobierno venezolano consideró que se "inició con rotundo éxito el proceso de refinanciamiento de la deuda externa". Según indicaron a la agencia AFP algunos participantes, el vicepresidente Tareck El Aissami, principal negociador y sancionado por el gobierno de Estados Unidos, prometió la creación de mesas técnicas para "evaluar propuestas" en próximas citas, pero sin precisar fechas.
Lo que sí les anunció Aissami es que el banco de inversión alemán Deutsche Bank, suspenderá este mes algunos servicios bancarios a su gobierno, dijeron tres acreedores presentes en la cita a Reuters.
La calificación empeora, las perspectivas también
Con las reservas más bajas en 15 años y afectada por las sanciones impuestas por Estados Unidos -que han generado retrasos en la cadena de pagos-, la potencia petrolera no ha cumplido en los últimos meses con lo que debía.
S&P señala que las sanciones a Venezuela y a algunos funcionarios del gobierno "probablemente resulten en una larga y difícil negociación con los tenedores de bonos".
A principios de mes, el presidente Nicolás Maduro aseguró que su gobierno comenzaría a reestructurar la deuda externa y argumentó que las sanciones financieras estadounidenses están paralizando la capacidad de pago de la economía del país, que depende en gran medida del petróleo.
La consultora considera que hay un 50% de posibilidades de que Venezuela pueda volver a caer en impago en los próximos tres meses.
La firma señaló que están pendiente de abonar los pagos de otros cuatro cupones dentro del período de gracia, por un valor de 420 millones de dólares y si Venezuela no realiza esos pagos, la calificadora colocará también en "default" esas emisiones.
En paralelo, la agencia Fitch Ratings colocó el lunes la nota de la deuda de la petrolera estatal venezolana PDVSA en la categoría de incumplimiento restringido por el retraso en el pago de bonos en dólares.
"Estas calificaciones reflejan el incumplimiento de los bonos de la empresa con vencimientos el 2 de noviembre de 2017 y el 27 de octubre de 2017 debido a retrasos en el procesamiento, que provocaron que los acreedores recibieran los pagos del capital hasta una semana después de la fecha de vencimiento", dijo en un comunicado la agencia.