Ataque en Chattanooga obliga a gobernadores de seis estados a implementar nuevas medidas
Después del ataque perpetrado por Mohammad Yussuf Abdulazeez en contra de instalaciones militares en Chattanooga, Tennessee, los gobernadores de seis estados han implementado medidas para elevar la vigilancia y proteger los centros de reclutamiento de la Guardia Nacional, mientras los investigadores buscan esclarecer las causas del ataque que ha dejado cinco marines muertos.
Se trata de Indiana, Texas, Louisiana, Arkansas, Oklahoma y Florida, que buscan que los de la Guardia Nacional tomen distintas precauciones para evitar ser víctima de un ataque similar al del jueves.
Mike Pence, gobernador de Indiana, autorizó el suministro de armas a los soldados en las instalaciones locales de la Guardia Nacional, así como en los sitios de reclutamiento en todo el estado. Por su parte, Rick Scott, de Florida, ordenó que los reclutadores de la Guardia Nacional trabajasen en una armería. De Texas, Greg Abbott, les autorizó armar a sus en las bases militares de todo el estado. Medidas del mismo tipo se han implementado en Oklahoma.
“Armar a la Guardia Nacional en estas bases no sólo servirá como un disuasivo para cualquier persona que desee hacer daño a nuestros hombres y mujeres en servicio, sino que permitirá también que se proteja a quienes viven y trabajan en la base”, señaló Abbott.
Por su parte, los candidatos presidenciales republicanos Jeb Bush, Scott Walker y Donald Trump también han llamado al fin de la prohibición a los del servicio de llevar armas de fuego en las oficinas de reclutamiento militar.
La familia del tirador extiende sus condolencias
"La persona que cometió este horrible crimen no era el hijo que conocimos y amamos", subrayó la familia este sábado, para luego agregar que "no hay palabras para describir nuestra conmoción, horror y pena".
Mientras los investigadores trabajan en determinar el motivo del ataque, los parientes de Mohammad Yussuf Abdulazeez señalaron en un comunicado que el atacante sufría de depresión. "Desde hace muchos años nuestro hijo sufría de depresión. Nos entristece saber que su dolor se manifestó en este acto atroz de violencia", señaló el informe.
Cuatro infantes de marina y un marinero estadounidenses murieron luego de que Abdulazeez, estadounidense originario de Kuwait de 24 años, abriera fuego contra ellos en dos centros militares en la ciudad de Chattanooga, antes de ser abatido por la policía.
Las autoridades dicen que están tratando el caso como un "acto de terrorismo".
Los investigadores están estudiando los viajes de Abdulazeez al exterior y su actividad en las redes sociales para entender por qué llevó a cabo el ataque.
Abdulazeez vivía en un suburbio tranquilo de Chattanooga con su familia. Papeles de divorcio presentados por su madre también apuntan a una vida familiar infeliz, incluyendo acusaciones contra su padre por golpear a su esposa y sus cinco hijos.
Al parecer, el atacante tenía un blog en el que el lunes escribió que "la vida es corta y amarga", y que los musulmanes "no debían perder la oportunidad de someterse a Alá", según el centro de vigilancia de portales islamistas SITE.
Pero el agente del FBI Ed Reinhold dijo a CNN que hasta los momentos no contaban con indicios de que el atacante estuviera "inspirado en o dirigido por nadie más que él mismo".
El ataque engrosó la lista de hechos similares ocurridos en los últimos años contra edificios militares estadounidenses, como el ataque en 2009 a Fort Hood, Texas, en el que murieron 13 personas, o el de 2013 en el barrio Navy Yard de la capital federal Washington, que se saldó con 12 muertos.
El temor a los atacantes solitarios
Cabe recordar que el atentado perpetrado por Mohammad Yousseff Abdulaziz en Tennessee se suma a otros como el de Dylann Roof, quien en junio mató a nueve afroamericanos en una iglesia en Carolina del Sur.
Los objetivos de este par de atacantes solitarios varían, pero dan cuenta de un ataque contra un blanco específico, con perfiles que causan conflicto a los servicios de inteligencia por no provenir de un país lejano, sino estar entremezclados en la población local. Resulta complejo detectar y prevenir sus acciones, pues apenas dan indicios de sus intenciones.
La web del diario español El País destaca la división hecha por Christopher Swift, experto en terrorismo en la Universidad de Georgetown en Washington, sobre los atacantes solitarios. Da cuenta de cuatro perfiles: los que viajan a Oriente Próximo para enlistarse en grupos como el Estado Islámico; los que son entrenados por tales grupos y vuelven a sus países de origen para realizar acciones violentas.
En tercer lugar se encuentran quienes están dirigidos o inspirados por un líder, ya sea espiritual o simplemente alguien que “conocen” a través de internet. Finalmente, la cuarta categoría corresponde a a quellos que se radicalizan por su propia cuenta y perpetran un ataque sin necesitar ninguna inspiración del exterior.