La flor de cempasúchil es sin duda uno de los elementos característicos de la celebración del
Día de Muertos en México. Su especial color anaranjado y su aroma son parte esencial de los altares que las personas colocan para recordar a sus seres queridos que ya han fallecido.
Crédito: Jam Media/Getty Images
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De acuerdo con información de la
Secretaría de Educación Pública de México a esta flor también se le atribuyen cualidades curativas para afectaciones de la salud como dolor de estómago, diarrea, fiebre y padecimientos respiratorios.
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Esta planta originaria de México puede encontrarse en diferentes estados de ese país como Coahuila, San Luis Potosí, Ciudad de México, Morelos, Guerrero, Oaxaca y Puebla, siendo este último el mayor productor de la flor, luego de que el año pasado produjera más del 76.6 % a nivel nacional.
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Durante una
entrevista para la agencia de información Notimex, Jorge Valencia, productor de la flor de cempasúchil, explicó que el proceso de siembra de la planta inicia en el mes de julio, justo un poco antes de la temporada de lluvias, para que esté lista para su venta en el mes de octubre.
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La historia cuenta que Xóchitl y Huitzilin se amaban y todas las tardes subían a lo alto de una montaña a llevarle flores a Tonatiuh, el padre Sol. Un día Huitzilin tuvo que ir a la guerra y murió, al saberlo, Xóchitl le pidió a Tonatiuh que la uniera por siempre con su amor y la convirtió en una flor.
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