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Historias virales

Confundió la casa de su vecino con un cibercafé: hizo su tarea ahí por meses y nadie le dijo nada

La influencer acudió durante meses a la casa de su vecino, pensando que era un negocio de renta de computdoras e Internet. Ninguno de los habitantes le aclaró la situación, hasta que su abuela finalmente le reveló la verdad. Su historia rápidamente se volvió viral y divirtió a los s de redes sociales.

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Publicado 18 Jul 2024 – 02:19 PM EDT | Actualizado 18 Jul 2024 – 02:19 PM EDT
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Lupita Villalobos, influencer y conductora del podcast ‘Las Alucines’, compartió una anécdota muy divertida que dejó a sus seguidores sorprendidos. La originaria de Hermosillo, Sonora (México) narró cómo durante su adolescencia confundió la casa de un vecino con un cibercafé y utilizó la computadora para hacer su tarea durante meses, sin darse cuenta de su error.

La confusión comenzó de manera inocente. Lupita, que solía quedarse con su abuela, necesitaba una computadora para hacer sus labores escolares. Un día, mientras caminaba por el vecindario, notó que una casa tenía la puerta abierta y se veían dos computadoras dentro.

La joven asumió que se trataba de un café internet, así que decidió entrar y trabajar en la computadora que estaba disponible. En su podcast explicó:

“Cuando yo iba en la (escuela) secundaria, un vecino siempre tenía la puerta abierta, tenía dos computadoras. Y yo cuando me quedaba con mi abuela y tenía que hacer tarea, yo me iba y veía a un vato (joven) en la compu (tecleando) y yo entraba, decía: 'Hola' y me ponía hacer tarea”.


Según la influencer, cuando terminaba de hacer sus deberes escolares dejaba el pago correspondiente por el tiempo que usaba el equipo, que en ese tiempo eran 10 pesos mexicanos (unos 56 centavos de dólar en la actualidad) por hora.

"Terminaba mi tarea y decía 'Listo, aquí está', y dejaba el dinero sobre la mesa, y yo seguía mi camino", contó.

La situación se prolongó durante meses. De acuerdo a lo que contó en su programa, nadie le dijo que no era un negocio de renta de computadoras. Incluso, relató que en varias ocasiones le tocó presenciar que la familia estaba comiendo y ellos simplemente la saludaban.

Tiempo después, una vecina, intrigada por sus constantes visitas a la casa, decidió hablar con la abuela de la influencer.

"Una vecina le dijo a mi abuela: 'Oiga, doña Keta, ¿por qué su nieta se mete tanto a la casa de Rubén (el vecino)":true}