Estos alimentos provocan estreñimiento y tú ni te das cuenta ¡aléjate de ellos!
El estreñimiento es provocado por movimientos intestinales irregulares y lentos, lo que impide que la persona que lo padece pueda evacuar de manera correcta.
Existen diversos factores que pueden provocar este problema. Los principales son el estrés, no realizar ningún tipo de actividad física, tomar poca agua e incluso ciertos alimentos (principalmente aquellos bajos en fibra). Estos son algunas comidas que podrían causarte estreñimiento y cuyos efectos negativos desconocías.
Arroz blanco
El arroz blanco pasa por un proceso donde le es retirada la cascarilla, el salvado y el germen, que es donde se concentra la fibra. Lo que permanece es el almidón, que puede hacer más lentas las funciones digestivas.
Leche
La leche y todos sus derivados también resultan contraproducentes para el estómago, debido a que son ricos en grasas. A la vez, pueden ocasionar cólicos e hinchazón del estómago, principalmente en las personas que son intolerantes a la lactosa.
Carnes rojas
Los cortes de carne pueden causar estreñimiento, debido a que son pesados, lo que dificulta su digestión. Para contrarrestar sus efectos se recomienda acompañar su ingesta con alimentos ricos en fibra, principalmente verduras.
Café
La cafeína provoca que el organismo sea incapaz de establecer un ritmo natural en la digestión, lo que eventualmente ocasionará estreñimiento. Por lo mismo, debe controlarse el consumo de alimentos o bebidas que contengan esta sustancia.
Comida rápida
Cualquier alimento que forme parte de la comida rápida tiene efectos perjudiciales en el organismo. Son altos en grasa y contienen muy poca fibra. Comerlos con frecuencia puede generar estreñimiento crónico.
Pan blanco
El pan pasa por un proceso muy similar al del arroz, lo que le resta una gran cantidad de fibra. Además, está elaborado con harinas blancas refinadas que pueden afectar el movimiento intestinal.
Para propiciar una buena salud digestiva, es recomendable incluir en la dieta alimentos como lechuga, manzana, trigo, quinoa, avena, frijoles, lentejas, garbanzos, linaza, almendras, y semillas de chía, girasol y sésamo.
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