Adiós a los comentarios negativos de tu cuerpo: aprende a sentirte más bella y segura
Aunque no lo aceptemos, las críticas a nuestro cuerpo suelen ser comunes. Sin importar la edad, tipo de cuerpo o talla, casi todas las personas le encuentran un “defecto” a su físico.
Sin embargo, estas críticas o comentarios negativos que repetimos frente al espejo pueden tener una fuerte y mala repercusión en la manera en la que nos vemos a nosotros mismos.
Por ello, es importante aprender a controlar las autocríticas negativas. Aunque puede ser un proceso difícil, éstas son algunas maneras de lidiar con los comentarios dañinos sobre tu cuerpo.
Reconoce los pensamientos negativos
Amparo Millán, coach personal, señala que lo primero que tienes que hacer es escucharte. Es decir, es necesario hacerte consciente de que estás haciendo comentarios de ti misma y preguntarte cuándo o de dónde nacen estos e intentar recordar si alguien más te lo ha dicho en el pasado.
Esto te ayudará, con el tiempo, a saber en qué momento parar la autocrítica y cómo expresarte de una manera positiva acerca de tu cuerpo.
¿Te sirve para algo esta autocrítica?
El psicólogo Ángel Rull señala que «la autocrítica está destinada a la mejora» y que de nada sirve señalar un error (en este caso un aspecto físico) si es algo que no se puede cambiar.
En el caso del aspecto físico, lo cierto es que hay algunas cosas que se pueden cambiar (bajar de peso o tonificar músculos) y otras que simplemente se quedarán contigo para siempre (como el color de la piel o complexión).
Por ello, si realmente quieres tonificar algún músculo, podrías cambiar las críticas y buscar rutinas de ejercicio para lograrlo, pero si sigues creyendo que el color de tus ojos 'es feo' lo mejor es que lo aceptes y aprendas a hablar positivamente de él.
Exprésate de otra manera (más gentil) de tu cuerpo
Para comenzar a aceptar y querer todas las partes de tu cuerpo, lo mejor es cambiar la manera en que hablas de él.
Una vez que detectaste los comentarios negativos que haces de tu físico, podrás reemplazarlos por otros más gentiles.
Por ejemplo, en vez de decir «mis estrías son horribles», puedes intentar frases como: «mis estrías muestran los cambios y crecimiento que he tenido a lo largo de los años y por eso son hermosas».
Otras afirmaciones positivas sobre tu cuerpo pueden ser: «mis piernas me permiten avanzar hacia mis metas», «mis brazos me permiten abrazar a mis seres queridos» o «valoro mi cuerpo porque me permite transitar por el mundo».
Cambia la manera en la que ves la dieta y el ejercicio
Por último, es importante que veas la dieta y el ejercicio como estilos de vida que te ayudarán a estar saludable y no con la única intención de estar flaca o tener una figura de modelo.
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