El viaje de un año para traer a Boeier de vuelta a casa no fue tarea fácil. Por suerte, la perseverancia y paciencia del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE.UU. para obtener la documentación necesaria, incluido el permiso CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), garantizaron que la tortuga volviera a casa sana y salva como pasajera de carga en un vuelo comercial de KLM de Ámsterdam a Houston.
Crédito: Zoológico de Houston.
Crédito: Zoológico de Houston.
La historia de Boeier pone de relieve la increíble dedicación de los múltiples organismos y organizaciones sin ánimo de lucro como U.S. Fish & Wildlife, Sea Animal Rescue Team Foundation (Países Bajos), Rotterdam Zoo, Houston Zoo y Texas A&M University-Galveston's Gulf Center for Sea Turtle Research, que han trabajado incansablemente para garantizar su supervivencia y el éxito de su regreso a su hábitat natural.
Crédito: Zoológico de Houston.
Crédito: Zoológico de Houston.