"Ilegal": ¿fue un error o una palabra calculada de Biden?
El presidente Joe Biden habló por cerca de una hora en el Estado de la Unión. Pero una palabra, una palabra muy específica, llamó la atención de muchos: "ilegal".
Fue cuando Biden mencionó la muerte de la estudiante de enfermería de Georgia, Laken Riley, y se refirió al inmigrante venezolano acusado de matarla como un “ilegal”.
Ocurrió cuando el presidente tuvo un tenso intercambio con la representante Marjorie Taylor Greene, republicana por Georgia que estaba vestida con un gorro rojo que decía Make America Great Again, el eslogan del expresidente Trump, y unos pines con el nombre de la estudiante asesinada y una camiseta que decía "di su nombre".
Greene gritó el nombre de la joven y Biden detuvo su discurso brevemente para responder.
¿Por qué? Es probable que el presidente "quisiera demostrar con eso que va en serio cuando habla del combate a la inmigración indocumentada. Que no es nada más un tema semántico", apunta. "Eso lo pone de malas con los grupos de defensa de derechos de los inmigrantes y lo pone de malas con partes de su propio partido que no les ha gustado que el presidente se refiriera así a inmigrantes indocumentados".
"Pero Biden (con el uso de la palabra 'ilegal') probablemente le está hablando a un público más allá del partido. A un público que tal vez quedó huérfano con la salida de Nikki Haley tras su fallida campaña por la nominación republicana. A un público conservador moderado que toma muy en serio el tema de la inmigración también y al cual quiere atraer para apuntalar su coalición política de cara a las elecciones presidenciales".