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Actualidad

Vladimir Putin comparó al exdirector del FBI con Snowden y le ofreció asilo político

Publicado 15 Jun 2017 – 02:00 PM EDT | Actualizado 14 Mar 2018 – 09:48 AM EDT
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Una clara señal del momento inédito que atraviesa la política estadounidense —y por consiguiente el escenario político internacional— es la relevancia que ha adquirido James Comey, el exdirector del FBI despedido por Donald Trump el pasado mes de mayo.

¿Cuándo el nombre de un oficial de inteligencia federal estadounidense fue tan notorio y citado en las noticias?

James Comey ha seguido un tumultuoso camino en los últimos tiempos, pasando de héroe a villano, o viceversa, dependiendo si se le pregunta a un republicano y partidario de Trump o a un demócrata opositor al gobierno, lo que en cierta forma habla bien de él, más allá de consideraciones sobre la pertinencia y justificación de sus acciones.

En el período electoral fue un villano para los demócratas, al reabrir la investigación sobre Hillary Clinton, sus correos electrónicos y su servidor privado, y anunciarlo ante el congreso días antes de las elecciones, lo que, según diversos análisis, perjudicó definitivamente las chances de la candidata demócrata y favoreció a Trump.

Poco después Comey dijo que la investigación había finalizado y que no hubo nada ilegal en el accionar de Clinton. Aunque el daño ya estaba hecho (si asumimos que, en efecto, sembrar dudas sobre la legalidad de las acciones de la candidata antes de las elecciones la perjudicó), con esto comenzó a dar el giro que lo llevaría después a convertirse en el gran villano de la istración Trump, y pagar esto con su despido.

Para complejizar un poco más la situación, ha entrado en escena Vladimir Putin.

Sobra decir que el líder ruso no es una figura que despierte mucha simpatía en los Estados Unidos, o al menos no tanto como para expresarla públicamente, salvo tal vez por Oliver Stone.

Así que habrá que ver qué significa para Comey esta oferta que el presidente ruso le ha realizado públicamente.

«¿Cuál es la diferencia entre el exdirector del FBI y Edward Snowden?» se preguntó Putin en una aparición en la televisión pública rusa.

«Comey dijo que había tomado notas de su conversación con el presidente Trump y que la filtró a los medios a través de un amigo» consideró Putin, «lo que suena y se ve muy raro: el director de un servicio de inteligencia dejando registro de una charla con su comandante superior y filtrándolo a la prensa».

«Esto no es el accionar de un director de inteligencia, sino de un activista civil que defiende una cierta postura» dijo Putin.

¿Está criticando Putin la falta de lealtad de Comey?

Precisamente en la entrevista exclusiva con Oliver Stone que ha sido ampliamente promocionada en los Estados Unidos en estos días, se pudo ver un adelanto en el que habla de Snowden y dice, de manera un poco ambigua, que no está de acuerdo con lo que hizo, que no debería haberlo hecho, pero que no lo considera un traidor a la patria.

De todas maneras continuó:

«Por cierto, si Comey se ve acusado de algo por la fiscalía respecto a sus acciones, le daremos asilo político también».

Rusia dio asilo político a Snowden en 2013, en principio por un año, pero luego con un permiso extendido hasta por lo menos 2020.

Resumiendo: James Comey fue despedido por Donald Trump presuntamente por negarse a abandonar la investigación sobre la interferencia rusa en las elecciones estadounidenses y los vínculos de la campaña de Trump con aquel país.

Una investigación que potencialmente podía dañar a Vladimir Putin y su gobierno.

Ahora Putin ofrece asilo político al encargado de esa investigación trunca, en caso de que el gobierno de Trump, ese con el que supuestamente conspiró, quiera acusarlo.

No te pierdas el próximo capítulo de esta apasionante novela, que con protagonistas como Trump y Putin, promete ser cada vez más apasionante. 

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