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Ciencia y Tecnología

Los tienes por todos lados, ¿pero sabes qué son exactamente los lunares?

Publicado 4 Sep 2015 – 12:00 PM EDT | Actualizado 2 Abr 2018 – 09:15 AM EDT
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Todos tenemos lunares, algunos más, algunos menos, pero, en general, es algo sumamente común en el cuerpo humano. Si te analizas en detalles podrás observar cuántos lunares tienes, al menos de forma aproximada ya que puedes perder alguno de vista.

Básicamente, los lunares son pequeños puntos de la piel donde se concentra una mayor cantidad de melanina, que es la molécula responsable de dar color no solo a la piel, sino también al pelo y al iris de los ojos.

La melanina es la responsable de las diferentes tonalidades que tiene la piel, y cuando se concentra de forma desigual en lugares concretos se producen los lunares. Todos los individuos tenemos lunares, incluso quienes tenemos la piel más oscura, aunque sean más difíciles de notar debido a que no contrastan tanto con nuestro tono de piel.

Los lunares comunes son de color marrón, aunque en algunos casos más extraños pueden adoptar otras tonalidades. Más allá del color del lunar, lo más relevante a la hora de analizar si se trata de un lunar benigno o no, es observar si cambia de color, forma y/o tamaño con el paso del tiempo.

¿Cuándo un lunar puede ser peligroso?

Los lunares son considerados tumores de la piel y pueden ser congénitos —desde el nacimiento— o adquiridos a lo largo de la vida. Es completamente normal que las personas tengan más lunares a medida que envejecen, sin embargo, si una persona experimenta un aumento demasiado acelerado de su cantidad de lunares, es conveniente que lo analice un médico.

Si bien los lunares no suelen presentar ningún tipo de problema para la salud, a veces se los puede confundir con otro tipo de patologías de la piel. En caso de que un lunar cambie de tamaño o color, adquiera una forma irregular, o genere comezón o algún tipo de molestia, también es necesario que lo analice un médico.

Los médicos analizan la naturaleza del lunar y en base a ello evalúan la posibilidad de quitarlo. La mayoría de las veces que un médico decide extraer un lunar, se trata de una cirugía simplemente preventiva.

Luego, el lunar es enviado al laboratorio y allí se determina si era o no maligno. El procedimiento se realiza con anestesia local y no tiene ningún tipo de contraindicación o efecto secundario. Si luego de extraído, el ańalisis de laboratorio indicó que el lunar era maligno es probable que el médico indique más estudios y el tratamiento que crea necesario.

Personalmente me han removido varios lunares y ninguno resultó ser maligno. Es un procedimiento de lo más común, no es doloroso ni genera complicación alguna. ¿Te han quitado algún lunar a ti?

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