Estos Youtubers holandeses se drogan en cámara para educarnos
Nellie y Rens son tan adorables que perfectamente pueden ser parte del Disney Channel. Están sonrientes en un laboratorio de mentira para su canal de YouTube. Parece que están a punto de dar una lección de ciencias para niños, pero en realidad Nellie está por tomar éxtasis.
A lo largo de los diez minutos nos dice que la droga la hace sentirse “como una nube que flota” y que siente amor y ternura por todos. Pero en cuestión de minutos dice que siente mucha sed, a lo que Rens explica que eso pasa porque el éxtasis hace que la gente se sobrecaliente y necesite tomar agua constantemente, pero que por los antidiuréticos que tiene no puedes orinar y el agua se puede ir a tu torrente sanguíneo y, en el peor de los casos, a tu cerebro.
Seguramente no es la lección de biología que estabas esperando de estos rubios sonrientes. Ellos son los protagonistas de Drugslab, un segmento de un programa holandés, Spuiten en Slikken (Dispara y traga), que desde hace poco menos de un año tiene un canal muy popular en YouTube. No están a favor del consumo excesivo de drogas, sino en educar al público y mostrar los efectos en todas sus facetas, sin importar qué tan malas sean.
Cada semana uno de ellos prueba una droga distinta y documenta sus efectos. Es periodismo gonzo del viejo, donde un presentador vive en primera persona la cosa que está investigando, en este caso las drogas duras. ¿Y lo más extraño de todo? Este programa está financiado por el gobierno de Holanda.
En realidad no es tan sorprendente. En 1976 se firmó una ley que permitía la posesión de marihuana en pequeñas cantidades y cualquiera que vaya a Amsterdam te puede asegurar que sus reglas con las drogas son bastante relajadas.
Si algo sabemos del país europeo es que son bien liberales con las sustancias psicodélicas, pero que sean así no significa que promuevan el uso de drogas fuertes. Por el contrario, el propósito del programa es educar a los s sobre los efectos y los riesgos de cada droga, todo contado de la manera más cotidiana posible.
En una entrevista con la revista Thump, Nellie dijo que «en el pasado aprendí que si la gente joven quiere experimentar con drogas, lo hará, pero eso no significa que quieran convertirse en drogadictos ni envenenarse. Mi esperanza es crear una manera de ver las drogas que sea abierta, honesta e inteligente: no hay que apartar la vista del problema, sino hablar de él».
Aún no se sabe si hablar de las drogas como algo normal puede llevar a que baje la cantidad de gente que las consuma, pero si es necesario que quienes elijan hacerlo sepan exactamente lo que les puede pasar.
Si, por el contrario, nunca consumiste ni te interesa hacerlo, también puedes divertirte viendo las ridiculeces que hacen estos dos rubios durante sus viajes psicodélicos y, a la vez, aprender algo nuevo.