{ "@context": "http://schema.org", "@type": "BreadcrumbList", "itemListElement": [ { "@type": "ListItem", "position": 1, "item": { "@id": "/explora", "name": "Explora" } } ] }
null: nullpx
Ciencia y Tecnología

Científicos detectaron un extraño ruido en el espacio: es el más alejado de la Tierra

Publicado 12 May 2021 – 12:24 PM EDT | Actualizado 12 May 2021 – 12:24 PM EDT
Comparte

La sonda Voyager 1 detectó un ruido en el espacio a más de 21,000 millones de kilómetros de la Tierra y es un descubrimiento importante para la comunidad científica.

La sonda Voyager 1 lleva en órbita más de 40 años y es el objeto construido por humanos más alejado de la Tierra, pues cruzó la heliopausa en 2012 y, desde entonces, ha explorado el espacio interestelar.

Hasta hace poco tiempo, se pensaba que el espacio interestelar era un inmenso vacío, pero un descubrimiento reciente de la sonda demostró lo contrario.

De acuerdo con una investigación de la Universidad de Cornell, Voyager envió datos de un zumbido detectado a más de 21,000 millones de kilómetros de la Tierra.

«Es muy débil y monótono, porque está en un ancho de banda de frecuencia estrecha. Estamos detectando el tenue y persistente zumbido del gas interestelar», explicó Stella Koch, investigadora de posgrado.

El hallazgo es importante porque permitirá a los investigadores descubrir cómo es realmente el espacio interestelar, del cual se tienen pocos datos.

Estudios anteriores se centraron en la detección de ondas de choque emitidas dentro del plasma interestelar; sin embargo, algunas de ellas fueron causadas por el Sol.

Por lo tanto, los investigadores debían esperar a que ocurriera algún evento importante con la estrella para detectar ondas. La nueva investigación les permitirá estudiar el espacio interestelar sin depender del Sol.

«Ahora sabemos que no necesitamos un evento fortuito relacionado con el Sol para medir el plasma interestelar. Independientemente de lo que esté haciendo el Sol, la Voyager está enviando detalles y lo hará continuamente», explicó la investigadora Shami Chatterjee, coautora del estudio.

Los científicos piensan que este solo es el inicio de una importante exploración espacial, ya que analizaron datos enviados en 2017; por lo tanto, podría haber más actividad de ondas de bajo nivel en el plasma interestelar.

«El medio interestelar es como una lluvia tranquila o suave. En el caso de un estallido solar, es como detectar un rayo en una tormenta eléctrica y luego vuelve a una lluvia suave», dijo James Cordes, autor principal del estudio.

Ahora los científicos darán seguimiento a las ondas detectadas por Voyager para estudiar la densidad del plasma interestelar.

No obstante, los datos de la sonda tardan 21 horas para llegar a la Tierra y la exploración de Voyager no forma parte de su misión principal, pues esta acabó en 2012.

A pesar de todavía ser funcional, la vida útil de Voyager llegará pronto a su fin, pues la sonda funciona con generadores termoeléctricos de radioisótopos, que se estima darán energía a la nave para mantenerse activa hasta 2025.

No te pierdas:

Comparte