Comprar cachorro: 5 cosas que debes tomar en cuenta
Dar la bienvenida a una mascota puede ser algo que enriquezca a toda la familia. Sin embargo, muchas personas deciden adoptar o comprar cachorro sin entender completamente las implicaciones que conlleva, como resultado de esto muchos perros acaban abandonados a los pocos meses. Aquí te presentamos 5 puntos a tomar en cuenta antes de adoptar/comprar un cachorro y saber si es la opción adecuada para tu familia:
1. Los perros tienen emociones: Estudios recientes en los cerebros de los perros han demostrado que estos animales tienen emociones complejas y que consideran a sus dueños como su familia, los extrañan cuando no están, se alegran de verlos y necesitan demostraciones físicas de afecto. Es por eso que dedicarle tiempo a un perro es esencial, aventarle una pelota dos veces por día y sacarlo al baño no es suficiente para que una mascota se encuentre saludable emocionalmente. Quien adquiere un cachorro también adquiere la responsabilidad de procurar el bienestar de otro ser que debe ser considerado como un miembro de la familia.
2. Necesitan espacio: No quiere decir que para poder comprar cachorro es necesario tener una casa con jardín de siete hectáreas, muchas personas hacen funcionar la situación de perro grande en departamentos a veces muy pequeños; lo que no hay que perder de vista es que los perros necesitan como mínimo dos paseos al día de aproximadamente 30-40 minutos. Esto, además de ser beneficioso para el perro, también beneficia a la familia, ya que además de hacer ejercicio—o que sea un excusa para salir en familia—el resultado de un perro paseado es que se cansa y causa menos problemas de destrozos dentro de la casa.
3. Los perros necesitan educación: Cuando uno camina por la calle y ve una persona corriendo con su perro y éste va sin correa sin correr hacia ningún otro lado y obedece a la primera, no es por virtud del perro, es gracias a la paciencia y esfuerzo de su dueño. Tomar la decisión de comprar cachorro equivale a comprometerse a educarlo, pues el perro será tan educado como el esfuerzo que sus dueños pongan. Los perros necesitan saber cuáles son los límites, pero es muy importante recalcar que siempre se obtendrá un mejor resultado si se utiliza el reforzamiento positivo (darle un premio o una felicitación cuando presenta la conducta que tú deseas). Los castigos no son muy efectivos, ya que el perro no sabe qué es lo que sí puede hacer, además de que es posible causarles sufrimiento innecesario.
4. La limpieza de tu casa…. cambia: No quiere decir que tu casa va a oler a perro siempre, pero sí es importante saber que tener un perro dentro de la casa conviviendo con la familia (como es lo ideal) no es muy compatible con personas muy obsesivas de la limpieza. Aquí juega un papel muy importante el tipo de perro que se elija, ya que hay perros más babosos que otros, o que sueltan pelo y otros que no, o incluso hay razas más olorosas. Pero la vida con un cachorro es garantía de desorden por lo menos en el primer mes, así que hay que armarse de paciencia y saber que la mayoría de los desastres, zapatos y muebles masticados pasarán algún día con un poco de madurez y educación.
5. Dónde adquirir el cachorro: Si vas a comprar un perro, lo ideal es hacerlo entre particulares, ya que los criaderos tienden a llevar a cabo prácticas poco éticas, además de que las enfermedades son más comunes. Una buena estrategia es acudir con un veterinario en el barrio y preguntar si hay personas con perros que vayan a tener cachorros próximamente. Otra opción es la de adoptar, además de ser mucho más económico, estás ayudando a darle un hogar a un perro que lo necesita.
¿Tantas responsabilidades te han asustado? No te preocupes, los cachorros llenan las casas de alegría, son excelente compañía y pueden servir de herramienta para enseñarle a tus hijos sobre responsabilidad hacia otros seres vivos. Son los compañeros ideales para toda la familia, no por nada han evolucionado durante miles—así es, miles—de años junto a nosotros. Date la oportunidad de abrir tu casa a otro miembro de la familia ¡y no te arrepentirás!