Su nieta la ayudó a fugarse del hogar de ancianos por una GRAN RAZÓN
Sadie Seller tiene 79 años y siempre tuvo un sueño que no había podido cumplir... al menos hasta ahora. Su nieta de 22 la ayudó a fugarse del hogar de ancianos para cumplirle el sueño.
Sadie siempre quiso hacerse un tatuaje, y a Samantha, su nieta, no se le ocurrió una mejor idea que TATUARSE JUNTAS un contorno de corazón.
El padre de Samantha se dio un gran susto cuando llegó al hogar de ancianos y solo encontró la silla de ruedas de Sadie ¡Sin sadie!, sin embargo el susto valió la pena ¿no lo crees?