Cómo inducir un parto naturalmente
Dar a luz es un verdadero milagro de la vida. Pero hay veces que, por distintas cuestiones, el parto se atrasa, y para muchas mujeres eso se convierte en un problema. ¡Imagina la ansiedad de una madre que espera tener a su hijo en brazos desde hace nueve meses!
Existen muchos medicamentos que ayudan a inducir un parto, aunque en varios casos utilizan productos químicos que pueden llegar a ser dañinos para la mamá o el bebé. Sin embargo, hay otros métodos más inofensivos para inducir un parto naturalmente y sin riesgos para la salud de ambos. Aquí te cuento cuáles son:
- Una de las maneras más sencillas de inducir el parto es caminando, pues con el movimiento la cabeza del bebé naturalmente ejerce presión sobre la pelvis y el cuello uterino, lo que a la vez favorece que el útero se contraiga.
- La acupuntura y la reflexología. Nuestro cuerpo tiene varios puntos de acupuntura que, estmulándolos, hacen que el útero se contraiga. De todos modos, para este método es necesario llamar a un médico o pedir consejos a una partera.
- ¿Sabías que la ansiedad y el estrés pueden retrasar el parto? Recuerda que los factores psicológicos tienen gran influencia en nuestro organismo. Por ello, una buena sesión de relajación te servirá para aliviar todas las preocupaciones de tu vida.
- El aceite de ricino es un método antiguo para inducir el parto naturalmente, aunque debe utilizarse como último recurso y en todos los casos bajo la supervisión de un médico. También puedes recurrir al aceite de onagra, que es una manera natural de aumentar los niveles de prostaglandina ayudando a madurar el cuello uterino. Se puede consumir por vía oral después de 34 semanas de gestación o insertar la cápsula en la vagina a las 38 semanas de embarazo, por supuesto siempre antes consultándolo con un médico.
- Consume comida picante. Como causan irritación en el sistema digestivo, consumir alimentos picantes ayuda a estimular las contracciones del útero.
- Practica sexo. Cuando se alcanza el orgasmo se libera oxcitocina, que es la misma hormona que causa las contracciones de parto.