{ "@context": "http://schema.org", "@type": "BreadcrumbList", "itemListElement": [ { "@type": "ListItem", "position": 1, "item": { "@id": "/estilo-de-vida", "name": "Estilo De Vida" } }, { "@type": "ListItem", "position": 2, "item": { "@id": "/estilo-de-vida/moda", "name": "Moda" } } ] }
null: nullpx
Diseñadores

Esa noble raza de diseñadores caribeños

La historia de la moda colombiana está marcada por diseñadores nacidos en el Caribe. ¿Qué tiene esa región que los hace tan creativos?
2 Nov 2015 – 10:44 PM EST
Comparte
Default image alt

Por Pilar Luna

Y la moda no se queda atrás. Buena parte de los mejores diseñadores colombianos son oriundos de la región Caribe, y sus puntadas han viajado por el mundo hablando de una tierra llena de colores, sabores, olores, paisajes, técnicas artesanales, música, diversidad étnica, costumbres y, sobretodo, de esas historias mágicas que ocurren en su suelo y que, como dijo el propio Gabo, superan cualquier novela de ficción.

La moda entró por el norte

En Colombia, por obvias razones, la moda entró por el norte, por el Mar Caribe, por donde llegaban las embarcaciones cargadas de los últimos productos que hacían furor en Europa. Eso, y el haber nacido rodeados de mar, les han dado a los nativos de las ciudades de la costa atlántica una gran creatividad, alimentada por ese espíritu de avanzada que se respira en este tipo de poblaciones multiculturales. En la costa caribeña colombiana no sólo hubo una gran mezcla de razas entre indígenas, africanos y españoles, sino que por ser la entrada al país, muchos inmigrantes palestinos, sirios, libaneses y jornados terminaron haciendo sus vidas en ciudades como Barranquilla, llamada la puerta de oro de Colombia.

También se asentaron pequeñas colonias de italianos, ses, ingleses, asiáticos y judíos, lo que implica una mezcla bastante diversa de costumbres que terminaron influyendo en toda la cultura caribe y, por consiguiente, en la riqueza de sus telas, estampados, colores, técnicas de costura y de construcción de las texturas. 

El realismo mágico hecho moda

La más reciente colección de Hernán Zajar, por ejemplo, un diseñador nacido en Mompox —población ubicada en la región caribe colombiana a orillas del río Magdalena—, está inspirada en esos colores y en tradiciones propias de la región. 

Zajar, uno de los creadores más conocidos de Colombia, llevó a la pasarela coloridas mujeres en las que se podía ver esa dualidad de las tradiciones religiosas arraigadas en su cultura (Mompox es reconocida por la celebración de la Semana Santa) y la alegría y sensualidad propias de la raza costeña. El mompoxino cuenta en cada colección alguna historia de esas que sólo se oyen en la costa como las que dejó plasmadas en sus libros el creador del realismo mágico.

Puntadas caribeñas

Pero Zajar no es el único que siempre ha tenido presente su espíritu a la hora de crear una moda muy propia del Caribe. Silvia Tcherassi, quien es catalogada como la diseñadora más importante del país y cuenta con una tienda muy exitosa en Miami, se ha destacado siempre por la gran mezcla de colores que logra en sus colecciones. Tonos fuertes, muy vivos que hablan siempre del lugar donde nació, Barranquilla, una ciudad muy cosmopolita donde las mujeres son muy elegantes y siempre están bien arregladas. 

Tcherassi ha logrado plasmar en sus propuestas esa sofisticación mezclada siempre con la alegría de la costa. Además, sus mochilas tejidas por los Wayuu (indígenas de la Guajira, zona más al norte de Colombia), intervenidas con pedrería, lentejuelas y lujosos hilos, se venden en la tiendas más elegantes del mundo.

Otros diseñadores muy importantes del país como Lina Cantillo, también nacida en Barranquilla y quien es la reina de la moda masculina en Colombia, le ha dado un espíritu diferente al hombre con colecciones muy propias de esa región pero muy modernas e internacionales. 

Haber nacido en la costa caribe hace que Cantillo trabaje muy bien materiales muy frescos como lino y algodón, pero con un toque bastante vanguardista y con toda la maestría de sus educación sartorial en Italia. Además, por lo general, usa una paleta de color que viaja por tonos bastante caribeños, extraídos de la gran riqueza cultural y de la privilegiada posición geográfica.

Una música que inspira

Como parte de esa cultura, la música también es fundamental en esta zona. Esa mezcla de ritmos africanos con gran influencia de todo el mestizaje que hubo en el territorio, convierte a los caribeños en una de las culturas donde más derroche de creatividad hay.

Juan Pablo Socarrás, un joven diseñador nacido en la zona interior de esta región caribeña, presentó su más reciente colección contando una historia muy personal de todos estos hombres que llegaron a instalarse en territorio colombiano para hacer su vida allá y que se enamoraron de la belleza del lugar y de las mujeres costeñas. Al final, el resultado es una historia rica en mezclas, siluetas y tejidos, que recreó con vallenato clásico (música típica del norte de Colombia) que, al igual que la literatura autóctona, también es bastante macondiano.

El Caribe le ha dado muchos nombres más a la moda. Beatriz Camacho, otra de las diseñadoras más influyentes del país; sca Miranda, quien nació en El Salvador pero toda su vida creativa la ha hecho en Barranquilla; Alfredo Barraza, el rey de los trajes de las reinas de belleza, y la gran “aguja de oro”, Amalín de Hazbún, quien es la pionera de este gran movimiento de diseñadores colombianos nacidos en el Caribe.


Comparte
RELACIONADOS:DiseñadoresEstilo de VidaModa