¿Llegando a los 30? 5 datos positivos que nadie te cuenta sobre esta maravillosa etapa
Ya habrás descubierto que los 30 son los nuevos 20. Recuerdo que cuando estaba en la adolescencia creía que llegar a los 20 me iba a hacer un vejestorio. ¡Qué equivocada estaba! Tenía una visión un poco errada de la realidad que ahora vivimos.
No voy a negarlo, llegué a un momento en mi vida en que me aterra cumplir años. La vida pasa tan rápido que tengo miedo de no poder cumplir todas mis metas y sueños. Pero a pesar de este temor me di cuenta de que el correr de los años no es tan negativo y que, al cumplir 30 por ejemplo, me brindarán los siguientes beneficios...
#1 Autoconfianza más fuerte
No en vano ya vivimos nuestro primer cuarto de siglo. Los años son el mejor amigo de la seguridad. En la medida en que vas creciendo, lo que los demás digan u opinen cada vez te interesa menos.
Yo soy muy segura de mí misma y es gracias a las experiencias que los años me han regalado.
#2 Autoconocimiento más profundo
Tienes mucho más claro qué es lo que quieres para tu vida y dispones de todo el entusiasmo y la energía para cumplir todas tus metas.
Puede, también, que algunas amistades queden en la nada, pero es parte del camino que te permitió crecer y madurar. Créeme que es un paso necesario y está bien.
#3 Más $
Y aquí se me vienen a la mente mis 18 años y todos los trabajos por los que pasé en que me pedían un mínimo de experiencia. ¡Cómo sufría!
Esta experiencia ahora juega a mi favor y me permitió conseguir un puesto de trabajo en el que la remuneración es mayor. ¡Cada vez estoy más cerca de construir mi propia casa!
#4 Mejores decisiones
De los errores se aprende, te lo dice una experta en el tema. Aprendí mucho de mis infinitos viejos errores que hoy me hacen la persona que soy.
#5 El momento justo
Es momento de encaminar nuestras vidas. Como ya somos buenos tomando decisiones, sabremos discernir mejor cuál será el momento perfecto para un nuevo trabajo, el tiempo de casarnos o de formar una familia.
Así que basta de deprimirte porque estás llegando a los 30 o ya los cumpliste. Es momento de que veas el lado bueno de la situación.
¡Yo no cambio mi edad por nada! Y tampoco mis años vividos anteriormente porque son los que forjaron mi personalidad.