{ "@context": "http://schema.org", "@type": "BreadcrumbList", "itemListElement": [ { "@type": "ListItem", "position": 1, "item": { "@id": "/estilo-de-vida", "name": "Estilo De Vida" } }, { "@type": "ListItem", "position": 2, "item": { "@id": "/estilo-de-vida/bienestar", "name": "Bienestar" } } ] }
null: nullpx
corazon

Consejos para distinguir los gases del dolor de pecho

Publicado 18 Mar 2015 – 12:00 AM EDT | Actualizado 2 Abr 2018 – 09:15 AM EDT
Comparte

Es frecuente verse afectado por dolores abdominales que remontan hacia el pecho, y esto puede llegar a preocupar. En función de los antecedentes y del estilo de vida de cada persona, es bueno acudir a un especialista o cambiar ciertos hábitos de vida, puesto que a veces estos dolores no son nada más que gases que se acumulan en el organismo.

Cómo distinguirlos

Los gases provocan, en general, dolores muy intensos y de manera aguda en ciertas partes del cuerpo. Pueden causar un dolor abdominal fuerte o débil, y acumularse a nivel del pecho. Sin embargo, tienen tendencia a desaparecer solos. Si ves que el dolor persiste, conviene vigilar los síntomas, quizás sea necesario recurrir a un especialista.

Los gases tienen la costumbre de provocar una inflamación, de manera que si sientes que el estómago está inflamado, se trata sin duda de gas. Eso da ganas de producir flatulencias. Un remedio que podemos aconsejar es una infusión de manzanilla mezclada con anís, de esta forma los gases se reducen.

Una buena forma para saber si se tienen gases es estar pendientes de los alimentos ingeridos anteriormente, y comprobar si se ha comido algo que pueda provocarlos. Hay alimentos, que en función de cada caso y de cada persona, pueden hacer daño y provocar malestar. Basta con hacer un balance sobre los alimentos que se digieren mal y que provocan gases.

Existen síntomas muy marcados que descartan la posibilidad de los gases, en estos casos hay que evitar comer y ponerse en o lo antes posible con un especialista para que responda a tus dudas y te ayude. Nos referimos a una dificultad respiratoria, dolor en el brazo izquierdo y dolor en esa parte del pecho, transpiración, dolor en la mandíbula. Estos últimos son generalmente los síntomas más acentuados que permiten detectar un infarto.

Normalmente, cuando se siente un dolor intenso en el pecho y tenemos un poco de fiebre, diarrea o vómitos, se trata de una infección digestiva y es necesario que un especialista la examine, y pueda prescribir los medicamentos oportunos para acabar con la infección.

Una vez que las diferencias entre gases y un posible infarto son claras, conviene examinar también tu entorno y tu estilo de vida para saber de qué dolor posible se trata. Bien informarse sobre eventuales antecedentes familiares, casos de infarto en la familia, comprobar que el estilo de vida que llevas es sano y que la alimentación es correcta y conveniente.

Comparte
RELACIONADOS:corazonViX.