¡Año nuevo, Godín nuevo! 5 cambios saludables que puedes aplicar en la oficina HOY mismo
Ya enfiestaste con toda la familia, comiste recalentado hasta el cansancio, te escapaste unos días a la playa, te quedaste en casa viendo Netflix en pijama y recordaste lo relajante que es despertar y no tener ninguna responsabilidad en el día.
Después de las fiestas y vacaciones decembrinas, volver a tu rutina diaria de ir a la oficina es algo bastante complicado, pero también es una oportunidad para mejorar la forma en que te desenvuelves en el trabajo y cuidar los diversos aspectos que lo rodean, como tu salud.
Para que inicies el año con el pie derecho y te vuelvas el godin más saludable de la oficina, aplica los consejos que te daremos a continuación.
1. No pases todo el día sentado, levántate y anda
Plumas, clips, post it, agua, botanas… en tu lugar tienes todo lo necesario para no levantarte de tu escritorio y solo preocuparte por trabajar arduamente ocho horas. Crees que estás listo para todo, pero, malas noticias, lo estás haciendo muy mal.
Estar tanto tiempo sentado es lo peor que le puedes hacer a tu salud, por eso es recomendable levantarte de tu lugar cada par de horas y caminar un poco. Ve a la tienda o ve a la oficina del jefe y hazle la plática, caminar esporádicamente te ayudará a que te concentres más en tu trabajo.
2. Lleva comida rica en proteína y deja de comer en la calle
Otro aspecto importante en el que debes poner especial atención si quieres cuidar tu salud, es en llevar una alimentación correcta en la oficina.
Olvídate de la rebanada de pizza fría que sobró del día anterior y deja de visitar ese puesto de gorditas, tan deliciosas como dañinas. Mejor opta por una comida práctica, saludable y alta en proteínas. Unas tapas de atún con queso son una excelente opción.
3. Date un break de 5 minutos para respirar profundamente
Entre los cansados reportes y las juntas para hablar de un tema que se podía haber resuelto con un mail, a veces olvidamos darnos un merecido break para descansar la vista y respirar.
Pero eso se puede solucionar. Establece un horario y busca un lugar tranquilo, como un cubículo o una oficina vacía, para cerrar los ojos y hacer una serie de respiraciones profundas. Estas pequeñas pausas laborales ayudarán a disminuir el estrés y que no te vuelvas loco con tanto trabajo.
4. Guarda en tu lugar munchies saludables
Todas las oficinas tienen a ese compañero buena onda que se la pasa todo el día ofreciéndote chicharrones, dulces, galletas chocolatosas y todos los snacks engordadores que puedes imaginar.
Para que no caigas en la tentación y termines con los dientes picados de tanto dulce, lo mejor es guardar en tu lugar munchies saludables como palomitas de maíz y avena o fruta como naranjas, uvas y manzanas. Éstas te darán el azúcar que le hace falta a tu día y te mantendrán hidratado.
5. No seas el último en irte
Sí, sabemos que te encanta tu trabajo, tanto que eres el primero en llegar y el último en irte, eres la representación perfecta del workaholico.
Sin embargo, tanta entrega y días de salir tarde pueden hacer que desarrolles cansancio mental, que trae como consecuencia afectaciones al sueño y al sistema nervioso.
No seas adicto al trabajo, recuerda, ningún objetivo laboral vale más que tu salud.
Si sigues los cinco consejos anteriores, empezarás con el pie derecho este nuevo año laboral sin sacrificar absolutamente nada en cuestión de salud. Solo tendrás que preocuparte por ser el godin alfa de la oficina y sorprender al jefe para que te de ese aumento que tanto has querido, ¡sí se puede!
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