3 errores que están arruinando tu jardín y no tenías idea
La jardinería no es la disciplina que más me gusta. ¿Y sabes por qué? Porque es mucho trabajo y en cambio un pequeño error puede echar a perder los logros que una esperó durante tantas semanas.
Te preguntarás entonces cómo es que estoy escribiendo sobre jardinería... ¡y es que de los errores también se aprende!
Y quiero compartir con mis lectoras estos tips que aprendí, a veces por ensayo y error:
1. La poda indiscriminada
Dado que me gustan las flores y que es sabido que las plantas podadas producen más flores y más frutos, solía podarlas demasiado y quizá muy cerca del invierno.
Esto les causaba que la savia saliera por el lugar de la poda durante más tiempo, debilitando a la planta y atrayendo a los dañinos insectos.
Opté por un recorte de las puntas de las ramas al principio o a mediados del otoño y obtuve mejores resultados.
2. Plantas demasiado juntas
Si bien es necesario que las plantas estén cerca unas de otras (ya sea con fines reproductivos o para que juntas creen su propio micro clima en verano y así resistan mejor el calor) no hay que situarlas tan cerca como para que sus talles y raíces se entrelacen.
Tal cercanía extrema además pronto causará que se agoten las reservas de nutrientes de la tierra en esa zona y que compitan por la luz solar.
3. Cortadora de césped defectuosa
¿A quién no le gusta tener un jardín cuyo césped sea digno de un campo de golf? Para lograrlo debemos mantenerlo durante todo el año y las cortadoras son grandes aliadas.
Sin embargo, cuando hay obstáculos en su camino suelen causar más daño que bien. ¿Y cuáles podrían ser tales obstáculos que frenaran la cuchilla y desgarraran tu césped? Piedras, escombros, piñas e incluso la famosa “pinocha” o “ resaca de pino” que se acumula en el terreno de esta conífera monocultivo.
Tales obstáculos dañan tanto la cortadora como el césped mismo.
>Y a propósito de césped, no te pierdas estos trucos para tener el césped más verde.
Estos tres errores me han costado varias desilusiones, pero desde que coloco las plantas de modo que todas reciban aire y luz solar, no corto demasiado seguido ni violentamente el césped a su alrededor ni las podo sin piedad ellas me lo han agradecido con flores y hojas más sanas y exuberantes.