Crítica de Thor: Dioses caídos
Thor, el más reciente film de Marvel Studios, es una película tolerable para pasar el rato con acción, buenos efectos especiales y algunos momentos humorísticos pero no mucho más que eso. Debo decir que es mucho mejor que la chatarra de Iron Man 1 y 2, y marca lo que será una mejora substancial en la calidad de las películas Marvel.
La historia es simple y directa. Thor, príncipe de Asgard, es desterrado a la tierra y despojado de sus poderes debido a su arrogancia y también a las manipulaciones de Loki, su hermano. Para recuperar el mjolnir y volver a ser el dios del trueno, deberá demostrar humildad y bla bla bla.
La trama es predecible y las actuaciones son aceptables aunque no espectaculares. El punto fuerte está en las secuencias de acción que si bien no son nada del otro mundo tampoco son tan escasas ni mal producidas como las de Iron Man, ya que había más dinero para gastar (no me importan las opiniones de los fans obsesivos, Iron Man y su secuela no son buenos films).
Puntaje: 6/10- Un debut pasable y entretenido para Thor, que espero funcione mejor en Los Vengadores donde los poderes de los héroes más famosos del Universo Marvel (después de Spider-Man y los X-Men claro).