8 películas que tuvieron influencias estéticas de cómics (sin ser adaptaciones)
Si bien los cómics nacieron como una extensión de la literatura, le deben mucho de su estructura argumental y diversos géneros al cine; principalmente por explotar la función narrativa de las imágenes (recordemos que en los primeros cómics que incluyeron una trama compleja, los personajes debían explicar –en voz alta o mediante un globo de pensamiento– qué era lo que hacían en cada viñeta).
A lo largo de los años el género de las historietas evolucionó por sí solo gracias a incursionar en una estética propia y un ritmo diametralmente diferente a lo que se ve en la pantalla de un cine y, paradójicamente, es ahora el cine quien recurre a los cómics, no solo para realizar adaptaciones de dichas obras (donde el éxito de sus resultados habla por sí mismo), sino también para tratar de emular su estética, o al menos influenciarse por ella.
A continuación veremos 8 casos de películas que tuvieron influencias estéticas de cómics (sin ser adaptaciones de ninguno en particular).
1. The Fifth Element (1997)
Esbozada por Luc Besson en su adolescencia y retocada a principios de los 90 para incluir ideas nuevas y más pulidas. Tanto la trama base como la estética de la película están inspiradas en la historieta sa de fantasía y ciencia ficción Arzach, escrita e ilustrada por el genial Jean Giraud (más conocido como Moebius), y la colección de Valérian, agent spatio-temporel, cuyo guion corrió a cargo de Pierre Christin y el dibujo por Jean-Claude Mézières.
2. Underworld (2003)
Una aventura de acción sobrenatural que emplea una estética gótica (en lo referente a la apariencia de los personajes y la ambientación general). Si bien su autor y director, Len Wiseman, ha recibido críticas y querellas legales por (supuestamente) plagiar la trama de un juego de rol de White Wolf Publishing, el diseño de su imagen y presentación visual del entorno recuerda mucho al manga Kamikaze de Satoshi Shiki y a las ilustraciones de Todd McFarlane para su cómic Spawn.
3. Mirrormask (2005)
Es una historia surrealista de carácter onírico escrita en conjunto por Neil Gaiman (autor de Sandman) y el ilustrador Dave McKean (famoso por su trabajo en Arkham Asylum: A Serious House on Serious Earth), quien además dirigió la película. Su estética abstracta saturada y por momentos grotesca, denota de inmediato que McKean también estuvo detrás de su diseño visual; varios de los personajes presentes en el film recuerdan mucho a las portadas del cómic Sandman.
4. The Fountain (2006)
Una película dramática casi experimental de Darren Aronofsky que presenta a 3 diferentes personajes masculinos en distintas épocas de la historia en la búsqueda de la eternidad junto a su verdadero amor. Tanto su guion como varios momentos de la película contienen una inspiración de otros filmes (como The Matrix (1999), 2001: A Space Odyssey (1968), entre otras), pero el arte detrás de la representación del “árbol de la vida” recuerda mucho a las portadas de Swamp Thing realizadas por Stephen Bissette.
Ver también: 25 películas y series que se convirtieron en cómics
5. Ultraviolet (2006)
Escrita y dirigida por Kurt Wimmer y con una estructura argumental similar a Equilibrium (2002), una película previa del mismo realizador. El film desde sus títulos utiliza una fuerte temática de cómics a pesar de ser un guion original; su estética saturada de objetos con colores vivos y tecnología imposible denotan una fuerte inspiración en cómics como Defcon 4 de Jeff Mariotte y Jim Lee, o los mangas Applessed o Ghost in the Shell de Masamune Shirow.
6. Bunraku (2010)
Dirigida y escrita por Guy Moshe, esta película mezcla los géneros western, noir, yakuza y samuráis, para crear una película de acción con una estética única, con una iluminación dura y colores que contrastan entre sí (como el verde, el púrpura y el azul oscuro), que muchas veces recuerdan a la técnica de coloración por gama que se empleaba en los cómics de fines de los 70 hasta mediados de los 80; como se ve en Watchmen de Alan Moore, ilustrado por Dave Gibbons.
7. Sucker Punch (2011)
Este guion simple, que explota de sobremanera el poder del impacto visual en conjunto con la música es comparado por muchos críticos, a un videoclip. La utilización de diferentes “realidades” con estéticas propias es un recurso muy usado en los cómics y, principalmente, en los mangas japoneses al personificar a las heroínas como temibles guerreras pero con aspecto adorable e insinuante a la vez, como se ha visto en mangas como Tenjô Tenge del mangaka Oh Great!.
8. 47 Ronin (2013)
A pesar de estar inspirada en una leyenda trágica de Japón (que a su vez está basada en un incidente históricamente real), la película contiene muchos elementos histórica y culturalmente erróneos con una gran dosis de fantasía que, muchos consideran, fue la mayor causa de su fracaso ante el público y la crítica. El film transmite un inconfundible ambiente que recuerda mucho a un manga épico heroico, tal como Bastard!! de Kazushi Hagiwara, o Basilisk de Masaki Segawa.