Lo más divertido y destacado de Jimmy Kimmel en los Premios Oscar 2017
La ceremonia de los Premios Oscar 2017 será recordada por el insólito error sobre el final, en el que entre Warren Beatty y Faye Dunaway se las arreglaron para anunciar la película ganadora equivocada, ocasionando caos, confusión, indignación y, sobre todo, la posibilidad de infinitos chistes y memes.
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Pero antes de todo eso hubo una ceremonia completamente normal y corriente, es decir por momentos irregular, con todos los tradicionales segmentos obligatorios, desde monólogos humorísticos y números musicales hasta momentos emotivos, y algunas sorpresas e intentos de humor no del todo eficaces (esos “turistas”). La ceremonia fue conducida por primera vez por Jimmy Kimmel.
Su conducción continúa una cierta tradición de los Premios Oscar que es la de tener de anfitrión un comediante célebre por su show televisivo; antes fueron Johnny Carson y David Letterman, más recientemente Jon Stewart y Ellen DeGeneres, o incluso Seth MacFarlane y Neil Patrick Harris.
Jimmy Kimmel no es el conductor más popular de la televisión late night estadounidense (puesto que se lleva por un buen margen Jimmy Fallon), pero cumple con los requisitos necesarios para la ceremonia: es un comediante con carisma, experimentado en el arte de dominar con soltura el ritmo y las exigencias de un programa de TV en vivo y, en particular, es muy bueno encontrando dinámicas humorísticas y originales en su relacionamiento con las grandes estrellas de Hollywood.
Curiosamente, a diferencia de los conductores mencionados antes, Kimmel decidió replicar en los Premios Oscar algunos de los grandes hits de su programa Jimmy Kimmel Live, notoriamente el segmento «Mean Tweets» (“Tweets malvados”, donde los famosos leen insultos dirigidos a ellos en Twitter) y la famosa vieja “pelea” que mantiene con Matt Damon.
Fueron posiblemente de los momentos más divertidos de la ceremonia, pero indudablemente no son segmentos surgidos de la originalidad y, por otra parte, el chiste de su enfrentamiento con Matt Damon debe haber sido incomprensible o estúpido para una buena parte del público que no tendría conocimiento previo de éste (además del hecho no muy simpático de que parecieran aprovecharse de un evento como los Oscar para “promocionar” su propio show).
Al mismo tiempo, la ceremonia pareció tomar también como inspiración aquella bastante célebre de hace un par de años conducida por Ellen.
En aquella ocasión hubo delivery de pizza a las estrellas y una selfie que rompió Twitter; en ésta hubo bocadillos que caían desde el techo y un par de tweets dirigidos a Donald Trump (obviamente).
Pero como es inevitable, en sus monólogos o pequeños bits entre discursos y premios, Jimmy Kimmel nos dejó algunas frases destacables y/o divertidas, que recordamos a continuación:
Países extranjeros y su visión de Estados Unidos
¿Crítica a Mel Gibson?
La parte seria
Amigándose con Matt Damon
Gracias Trump
Hemos progresado
El director más joven de los Oscar
La bienvenida a extranjeros y discriminación en Hollywood
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