Game of Thrones: ya ni el cartero saluda a Ser Bronn por haber disparado al dragón
La brutal batalla del episodio “The Spoils of War” en Game of Thrones tuvo varias peculiaridades, pero hay una pequeña que tal vez se destaca: el enorme dragón montado por Daenerys Targaryen que incineró a la mitad del ejército de los Lannister.
Los creadores de la serie y guionistas de este episodio, compararon la aparición de Drogon en la batalla con «la aparición de un caza F-16 en una batalla medieval».
Ciertamente dejó al ejército comandado por Jaime Lannister en gran desventaja, y a todos sus soldados boquiabiertos y aterrados. Al menos los que tuvieron tiempo de hacerlo.
Pero los Lannister, gracias a la mente siniestra de Qyburn, el Mengele de los Siete Reinos, ahora convertido en Mano de la Reina igualmente siniestra, tenían un as bajo la manga: su arma anti dragones (el escorpión), que apareció para sumar dramatismo al final de la batalla (y del episodio).
¿Quién tiene dos manos y puede maniobrar la portentosa arma digna de su objetivo?
No hubo más remedio para el pobre Ser Bronn, quien en realidad lo único que quiere es su oro y su castillo, pero se ha visto obligado a hacer el trabajo sucio.
Jerome Flynn, el actor que interpreta a Bronn, habló sobre el episodio y su papel decisivo en la batalla.
Entre otras cosas reveló que haber sido el responsable de herir gravemente a Drogon no le ha significado precisamente la simpatía de los fans de Game of Thrones:
Sobre la filmación de esa secuencia dijo que era «una de las filmaciones más emocionantes» que ha tenido en la serie, y que el arma funciona realmente:
También elogió el trabajo del director y los realizadores:
El destino de Ser Bronn, mientras tanto, es incierto. Lo único que podemos esperar es que, si sobrevive, logre reunir nuevamente ese oro perdido durante la batalla.