6 cosas que vamos a extrañar de Mad Men
Mad Men, escrita por Matthew Weiner, mismo guionista de la famosa serie Los Soprano de HBO, marcó un antes y después en la televisión estadounidense.
Luego de su estreno en el 2007, fue suficiente para catapultar a una simple cadena de cable básico como AMC. Ahora es sinónimo de megaproducción, con actores de alto nivel y un espacio para exitosos programas como Breaking Bad y The Walking Dead.
La serie trata sobre la vida de Don Draper, un ejecutivo de una empresa de publicidad, rodeado de jefes, esposa, amantes, amigos y secretarias. Todos ellos fumaban, bebían, se daban buena vida, y a su vez, trabajan duro por la publicidad.
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Pero hay mucho para reseñar, así que a continuación, veremos algunas cosas de Mad Men que vamos a extrañar, por siempre:
1. El genial opening con créditos
Uno de los atractivos de Mad Men que nos hipnotizó desde el principio, fue su opening con la canción de RJD2: A Beautiful Mind. Aquí se mostraba la silueta de Don Draper cayendo lentamente entre rascacielos plagados de carteles publicitarios. Hasta Los Simpson tuvo su opening al estilo de Mad Men.
2. El vestuario que todos queremos para ir al trabajo
Mad Men cumplía perfectamente el atrezo de la época de los años 60 y 70. Rescataban las distintas modas, la feminidad, la elegancia de pies a cabeza y los movimientos hippies y glamurosos.
3. Que de verdad se aprende de historia y publicidad
Mad Men fue una serie de ciencia ficción que se conectaba con sucesos reales de la historia, como por ejemplo, el asesinato de J.F. Kennedy, o la muerte de Marilyn Monroe. Se dio la aparición de personajes como Mccann Erickson, o Grey: publicistas reales. Era una referencia de aprendizajes para todos los estudiantes y trabajadores del área publicitaria.
4. Las mujeres de Mad Men
A pesar de que Mad Men se desarrollaba en los años 60 y 70, cuando el machismo inundaba las clases sociales, esta serie se encargó de darle protagonismo a personalidades femeninas: fuertes, carismáticas, sexis y directas. Peggy Olson y Joan Holloway, por ejemplo.
5. Don Draper… obviamente…
“People were buying cigarettes before Freud was born”. Don Draper.
El protagonista y alma de Mad Men, Don Draper, ese seductor, talentoso, bebedor, fumador entregado, egoísta, e infiel, eran una de las características de este personaje. Resultó ser uno de los mejores publicistas de New York, y un personaje emblemático de la TV. Al mimos tiempo, era un total antihéroe que logró su cometido a través de su poderosa personalidad.
6. Su acción cargada de drama
Mad Men era actuación, en todo sentido. Guiones llenos de realidad. Era el día a día de unos publicistas en una agencia llamada Sterling, Cooper, Draper & Partners y posteriormente Sterling, Cooper & Partners. Las conversaciones y confesiones de sofás, las fiestas, las conversaciones telefónicas, las infidelidades, los amores secretos… en fin, una montaña rusa de emociones.
Todos sabemos que Mad Men fue una serie que merece su futura repetición.
Consejo para los que no la han visto: ya que llegó a su final, no hay excusas para disfrutarla de principio a fin.