5 escenas de films de Quentin Tarantino que giran en torno a la comida
No todo es sangre y diálogos crudos en el universo de Tarantino, también existen pequeños detalles que enriquecen y nos guiñan un poco.
La hora de comer representa un ritual en sí mismo. Nos sentamos y preparamos para degustar lo que tenemos en el plato pero en el caso de los films de Tarantino este momento puede tener grandes significados; desde una conversación poco banal a instantes llenos de tensión.
Sin importar la historia, el contexto o los personajes, la comida indica, además, un instante crucial y que debemos prestar mucha atención.
Pulp Fiction
Antes de hacer la escena de baile más icónica del cine, Mia ( Uma Thurman) y Vincent ( John Travolta) se sientan y comienzan a intercambiar experiencias mientras pasa la noche. Al recibir la malteada, Mia se conecta con su interlocutor. Ambos comienzan a sentirse cómodos gracias a la costosa bebida.
Kill Bill vol 1
El espacio para la comida también es de suma importancia para ambas partes de este film, pero en esta en particular, Beatrix al hacer un break en el enfrentamiento con Vernita Green en la cocina de su casa porque tiene que prepararle la merienda a su hija. Tal y como se tratase de un día cualquiera.
En este lapso, decidan qué lugar y qué armas utilizarán para enfrentarse con más comodidad pero es evidente que algo se aproxima. La tensión aumenta más y más.
Inglorious Bastards
Shoshanna, tras huir del Coronel Hans Landa, se construye una identidad falsa para proteger su integridad. Todo bien hasta ahora.
No obstante, el héroe de guerra Frederick Zoller queda prendado de ella y trata de impresionarla lo más posible. A pesar de sus desplantes, Shoshanna queda atrapada en una mesa con los personajes más despreciables del nazismo, entre ellos el autor de la muerte de su familia, el coronel Landa.
Sin poder escapar, Shoshanna trata de mantener la entereza mientras ve a su enemigo deleitándose con un strudel de manzana. En esta escena, queda en evidencia el desprecio y el terror que del que es capaz.
The Hateful Eight
En la producción más reciente de Tarantino, vemos un lado oscuro y crudo del lejano oeste americano. Esta vez, todos los personajes, están encerrados en una cabaña en medio del invierno.
El guiso de Minnie y el café son dos elementos que les reconforta en medio del frío pero que aviva las antipatías entre ellos. Conversan, comparten pero no se olvida que hay una conspiración que va naciendo y la sombra de la duda sobre el paradero de los verdaderos dueños van creciendo de manera alarmante.
Reservoir Dogs
Un grupo de criminales han sido contratados para realizar un robo. No conocen sus verdaderas identidades pero se comunican por seudónimos.
Antes de emprender la misión, se reúnen en un café para desayunar. Este contexto sirve para hablar de asuntos banales como Madonna o si es correcto o no dejar propina. Poco a poco vemos rasgos de los involucrados y cómo se expresan en medio de la cotidianeidad.
Ahora, seguramente, le pondremos cuidado a estas escenas un tanto atípicas dentro de lo ya ampliamente conocido en el cine de Tarantino.