10 lecciones de Disney que nunca debimos aprender
Las películas de Disney llenaron de magia nuestra infancia. No obstante, una vez que estamos más grandes, podemos notar que muchas cosas presentadas en estos cuentos de hadas realmente no son nada buenas.
Sin duda, la primera y más legendaria lección que debemos olvidar es enamorarte de alguien que solo has visto una vez. Frozen ya redimió a Disney en este aspecto gracias a la historia de Anna y el terrible príncipe Hans.
Sin embargo, más allá de esta lección, existen más actos y cosas que debemos olvidar de varias de las películas favoritas de nuestra niñez.
Te presentamos 10 cosas que las películas de Disney nos enseñaron pero realmente son pésimas lecciones.
#1 ¿No le gustas tal y como eres? Haz todo lo posible por cambiar y enamorarlo
La Sirenita nos mostró todo lo que NO debes hacer para tener una relación. Sabiendo que nunca se iba a fijar en ella como sirena, Ariel decide desobedecer a su papá y vender su alma para que un chico que no tiene idea de quién es, sepa de su existencia y se enamore de ella.
Lo peor de todo es que seguramente esa persona no vale la pena, tal y como el príncipe Eric, quien nada más escuchó la voz de otra persona y bateó a Ariel.
#2 Tu físico importa más que lo que puedes decir
Dentro de las cosas que hace Ariel que sin duda debemos olvidar la poca importancia que le da a su voz, frente a su apariencia física.
Ariel literal decidió ceder su voz, sin importar lo valiosa que es, con tal de tener el cambio físico que tanto deseaba.
#3 Está bien besar a una mujer dormida
Tanto Blancanieves como La Bella Durmiente coronan este beso como el acto perfecto para salvar a las princesas.
Sin embargo, sabemos que en realidad es una muy mala acción y más considerando que el príncipe Florian y el príncipe Felipe sólo habían intercambiado un par de palabras con Blancanieves y Aurora antes de hacerlo.
#4 Si es malo contigo, significa que te ama
La Bella y la Bestia explotan al máximo la "magia del amor" cuando el secuestro de Bella se convierte en el inicio de su romántica relación con Bestia.
Somos conscientes que existe el Síndrome de Estocolmo. No obstante, no es una situación en la que nadie de nosotras quiera estar.
#5 Cuando la vida se pone difícil, huye
Entendemos que para Simba, siendo un cachorrito, era un poco difícil no creerle a su tío Scar y quedarse en la Piedra del Rey.
Sin embargo, existen otros ejemplos en donde los protagonistas mejor deciden deslindarse de sus obligaciones cuando la vida se torna difícil, tal y como lo hace Elsa en Frozen.
#6 Está bien iniciar una relación con mentiras
Al igual que Ariel con el príncipe Eric, Aladdin decidió cambiar con tal de enamorar a la princesa Jazmín. Y lo peor de todo es que este cambio está lleno de mentiras.
#7 Necesitas a un hombre para poder escapar de la vida que no quieres
Cenicienta nos muestra que la única forma en la que puede deslindarse de su terrible realidad como sirvienta es casándose con alguien.
#8 Tu cuerpo debe tener proporciones "perfectas"
En general, los personajes principales de Disney tienen cuerpos esbeltos y son, de acuerdo a estándares occidentales, atractivos. Sin embargo, las cinturas sumamente esbeltas, rasgos finos y demás proporciones "perfectas" no totalmente irreales.
#9 Tu familia política es mala
En varios de las películas de Disney podemos ver que los villanos suelen ser la familia política como la madrastra de Cenicienta y Blanca Nieves.
No obstante, después de vivir un poco sabemos que madrastra no es sinónimo de mujer malvada.
#10 Un beso puede solucionarlo todo
Es momento de dejar de creer que un beso puede solucionarlo todo. Sin duda, el cariño se agradece pero eso no significa que solucione tu vida.
En caso de creerlo así, puedes caer en el peligroso pensamiento de l "Tengamos un bebé" como la forma de solucionar problemas en tu matrimonio.
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